PALMA DE MALLORCA, 1 Ago. (EUROPA PRESS) -
La Guardia Civil ha desalojado la calle Pere Miquel Marqués de Palmanova (Calvià), después de que el 112 recibiese una llamada de una señora en la que avisaba que una persona le había llamado desde una cabina enfrente de su casa advirtiéndole de que tenía una bomba apunto de explotar en su vivienda, ubicada en el número 4, tercero C de un edificio ubicado en la citada calle.
Así, según informaron fuentes de la Guardia Civil y de los Bomberos de Mallorca a Europa Press, el desalojo se produjo alrededor de las 21.00 horas, si bien señalaron la alta probabilidad de que se trate de una broma de algún "gamberro" que se dedica a generar una 'psicosis', tras el atentado de ETA ocurrido el pasado jueves en el que fallecieron en Palmanova dos jóvenes agentes de la Guardia Civil, tras explotar la bomba lapa situada en los bajos de su vehículo.
Precisamente, el aviso de bomba se ha producido en una calle que finaliza en la playa y que está cercana al antiguo cuartel de la Guardia Civil, en el que el pasado jueves también tuvo que ser detonado un vehículo de la Benemérita por los agentes de los Gédax, después de que ETA también hubiese colocado otra bomba lapa, que, afortunadamente, no provocó ninguna víctima, dado que el coche no estaba siendo utilizado, ya que debía repararse.
No obstante, señalaron que tal como marca el protocolo, los agentes de desactivación de explosivos se encuentran en la zona registrando todos los vehículos, así como la vivienda afectada, con el fin de comprobar si el aviso de bomba es real o si se trata simplemente de una "broma de mal gusto y una gamberrada de algún graciosillo". Asimismo, los bomberos de Mallorca han habilitado un retén para en caso de que tengan que actuar de forma inmediata, mientras que el 061 ha enviado una ambulancia.
Se da la circunstancia de que el aviso de bomba se ha realizado una hora y media después de que los Reyes, Don Juan Carlos, y Doña Sofía, llegaran a la base aérea de Son Sant Joan, con el fin de pasar sus vacaciones de verano en su residencia estival del Palacio de Marivent, situada a escasos ocho kilómetros de Palmanova.
Así, a su llegada a la isla, el Rey afirmó que a los terroristas de ETA "seguiremos dándoles en la cabeza y hay que combatirlos hasta acabar con ellos", al tiempo que aseguró sentirse "segurísimo y encantado" de llegar a Mallorca.
