Desarticulada una red de proxenetas rumanos que controlaba la prostitución del polígono 'Marconi', en Madrid

MADRID 24 Feb. (EUROPA PRESS) -

Agentes de la Policía Nacional, en colaboración con otras unidades policiales, han detenido a 36 ciudadanos rumanos pertenecientes a una red de proxenetas que controlaba la totalidad de la prostitución del polígono 'Marconi', y "estaban en plenas conversaciones para controlar también el de Casa de Campo", en Madrid, informó hoy dicho cuerpo.

De acuerdo con las diligencias policiales, este grupo abarcaba el delito de la prostitución coactiva desde la fase de reclutar en el país de origen a la mujeres (preferentemente muy jóvenes y huérfanas) hasta su traslado a España, el alojamiento controlado y su transporte diario a los "puntos de trabajo".

Además, los proxenetas ejercían "extraordinaria violencia" sobre las mujeres, "las obligaban a semidesnudarse a la intemperie, realizar actos sexuales sin preservativo y trabajar 12 horas sin interrupción, que podían ser más si no lograban alcanzar unos determinados beneficios económicos".

Del total de detenidos, 19 fueron en Getafe (13 por delitos relativos a la prostitución y asociación ilícita y 6 por Ley de Extranjería); 16 en Madrid, todos por delitos contra los derechos de los ciudadanos extranjeros y uno en Valencia, por asociación ilícita, contra los derechos de los ciudadanos extranjeros y relativos a la prostitución.

Tras una larga investigación, los agentes identificaron a todos los integrantes del grupo y localizaron las viviendas que utilizaban: 5 en Madrid (calles de Rioja, García Luna, Trébol, Juan Duque, y Los Yébenes). Esta última la utilizaban para clonar tarjetas de crédito, crear programas a través de los cuales estafaban por Internet y hacer documentos falsos. Otros cinco domicilios se registraron en Getafe, (calles de Pensamiento, Cáceres, Mérida, avenida de España y Albacete), y otro en Valencia, desde el que el cabecilla viajaba a la capital para recoger el dinero de las meretrices y proxenetas.

Durante los registros domiciliarios, la policía incautó útiles para la clonación de tarjetas de crédito y falsificación de documentos, más de 400 tarjetas ya clonadas, escáner y programas informáticos, ordenadores conectados a dispositivos de copia, almacenaje y grabación de bandas magnéticas y los pasaportes retirados a las víctimas, entre otras cosas.

UNA LARGA INVESTIGACIÓN

Estas detenciones han sido el resultado de una operación que activó la Brigada de Policía Judicial el pasado mes de noviembre con el objetivo de seguir la pista de un grupo de ciudadanos rumanos, todos ellos procedentes de la región de Alexandría, dedicados a la explotación sexual de mujeres compatriotas, secuestros, extorsiones, falsificación de moneda, falsedad documental y receptación.

Las investigaciones, que comenzaron por delitos relativos a la prostitución, "se fueron complicando al irse desentrañando nuevas ramas del grupo", pero todas ellas confluían en la persona de Gheorghe D., un delincuente muy peligroso de 29 años de edad que controlaba directamente todas las actividades y el fichaje de los subalternos. Entre sus numerosos antecedentes figuran delitos contra el patrimonio, la libertad sexual y los derechos de los trabajadores y ciudadanos extranjeros, entre otros.

En el transcurso de la operación han sido liberadas 25 mujeres que malvivían en condiciones precarias y todos los detenidos han pasado ya a disposición judicial.