En la operación policial, fueron detenidos tres miembros de esta red y 23 mujeres por estancia ilegal
BILBAO, 6 Oct. (EUROPA PRESS) -
Tres personas fueron detenidas como presuntos integrantes de una red organizada que introducía ilegalmente en el país a mujeres procedentes de Sudamérica y les obligaba a ejercer la prostitución en clubes de alterne de Vizcaya, principalmente de la comarca del Duranguesado. En esta operación policial, también fueron arrestadas 23 mujeres por estancia ilegal, según informó hoy la Delegación del Gobierno en el País Vasco.
La organización, desarticulada tras las investigaciones llevadas a cabo por funcionarios de la Brigada Provincial de Extranjería y Documentación de la Comisaría del Cuerpo Nacional de Policía en Bilbao, estaba integrada por tres ciudadanos españoles.
Las primeras investigaciones se iniciaron hace varios meses cuando una mujer de origen sudamericano dejó constancia en un servicio de atención social de que había sido traída a España para trabajar como camarera, aunque en realidad la obligaban a ejercer la prostitución en el club "Zapai" de la localidad vizcaína de Zaldivar. La mujer relató además que era forzada a ingerir sustancias estupefacientes, en concreto cocaína, bajo amenazas de muerte a miembros de su familia residentes en su país de origen.
Tras contrastar esta información, se iniciaron las gestiones oportunas con el fin de identificar y detener a los autores de estos delitos, que culminaron con la detención del propietario de los clubes "Stress" y "Zapai", José E.V., el conductor encargado de trasladar a las mujeres obligadas a prostituirse, Roberto G.A., así como el camarero del local que era el encargado de recoger el dinero a las mujeres que mantenían alguna deuda originada por el traslado desde su país de origen hasta España, Rafael R.R.
La forma de operar de esta banda consistía en la captación de mujeres en sus países de origen, generalmente muy jóvenes, de un nivel socio-económico y cultural bajo y con cargas familiares a las que, con promesas de trabajo bien remunerado en España, se les facilitaban pasaportes, billetes de avión y dinero en efectivo, haciéndolas pasar por turistas con el fin de eludir los controles policiales.
En el aeropuerto eran recogidas por un miembro de la organización y trasladadas a pisos del propietario de los clubes, obligándolas a ejercer la prostitución mediante coacciones y amenazas, sometidas a una férrea disciplina, y en algunos casos a consumir sustancias estupefacientes.
GASTOS DE HASTA 6.000 EUROS
Los gastos originados por los viajes y traslados, a veces triplicados, alcanzaban en ocasiones los 6.000 euros, que deban ser abonados para abandonar los clubes.
En esta operación policial, también fueron arrestadas, por estancia irregular, 23 mujeres que se encontraban en el interior de los locales.
Concluidas las investigaciones a finales del pasado mes de septiembre e instruidas las oportunas diligencias, los responsables de la red fueron puestos a disposición del Juzgado de Instrucción de Guardia de Durango, que decretó su ingreso en prisión, además de la intervención de tres vehículos con los que efectuaban los traslados.
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