PAMPLONA, 30 Oct. (EUROPA PRESS) -
Agentes de la Policía Nacional han detenido en Pamplona a R.M.A., un madrileño de 39 años, como presunto autor de un delito de falsedad documental y contra la Hacienda Pública, al eludir el pago del IVA de vehículos de alta gama adquiridos en otros países. La cuota defraudada a las arcas españolas entre 2005 y 2008 ascendería a 25 millones de euros, existiendo un monto económico total en las transacciones de las cuentas investigadas de 156 millones.
Las investigaciones que propiciaron su detención, llevadas a cabo en colaboración con la Dependencia Regional de Aduanas de la Agencia Tributaria, Delegación Especial en Navarra, y dirigidas jurídicamente por el Juzgado de Instrucción número 5 de Pamplona, son continuación a la denominada 'Operación Leza' y desarrolladas mediante el estudio del entramado de personas dedicadas a la creación de empresas con objeto de la adquisición intracomunitaria de vehículos de alta gama eludiendo el pago de IVA de los mismos al ser introducidos en el mercado nacional.
Según informaron hoy fuentes policiales, la investigación desarrollada desde finales del año 2006 ya dio como resultado la detención de veinte personas por formar parte de la trama societaria desarticulada, entre los que se encontraba el cabeza de la misma, un empresario de Pamplona.
El modus operandi utilizado se identifica con el de tramas societarias para la defraudación de IVA, cuya dinámica consiste en la importación de los vehículos se sirve de una sociedad o de una persona física (testaferro), quien a su vez era administrador únicamente de derecho de la sociedad, con números de identificación fiscal internacionales, las cuales soportaban las transacciones económicas para la adquisición de los vehículos en diferentes países de la Unión Europea.
Tanto la persona física unas veces, como la sociedad en otras, no declaraban dichas adquisiciones ante Hacienda cuando incorporaban el vehículo al mercado interior estatal.
Este tipo de sociedades se denominan como 'trucha', ya que son las sociedades más difíciles de detectar porque no dejan rastro documental en el país de destino del bien adquirido, teniendo una duración limitada en el tiempo, puesto que al detectarse se corta su actividad.
Una vez que el vehículo se encuentra en territorio nacional, se pasa a la fase de matriculación del mismo ante la Jefatura Provincial de Tráfico. Para ello utilizan varias sociedades, la primera de ellas sería la que presentaría una factura de venta del vehículo en cuestión, pero no es la que la sociedad extranjera expediría a la empresa 'trucha', sino que es la de una empresa 'pantalla', y a su vez la matrícula del vehículo se realizaría a nombre de otra empresa o a nombre del comprador final.
Estas empresas denominadas 'pantalla' son utilizadas para ocultar la sociedad 'trucha', que es quien realmente esta adquiriendo los vehículos en la Unión Europea, explicaron las mismas fuentes.
En lo que respecta al ámbito económico las sociedades pantallas sirven para transferirse los fondos de unas a otras "dificultando enormemente su seguimiento hasta llegar a la sociedad 'trucha', destino de los mismos", antes de pasar finalmente al vendedor de los vehículos en países como Bélgica, Francia o Alemania.
Además, según añadieron, R.M.A. figura como titular de varias sociedades de las implicadas en la trama y como administrador de una sociedad de las denominadas 'pantalla', desde cuyas cuentas bancarias se han enviado fondos a las cuentas de las denominadas sociedades 'trucha', provenientes de empresas dedicadas a la compraventa del automóvil, por valor de varios millones de euros.
