BARCELONA 21 Jul. (EUROPA PRESS) -
Los Mossos d'Esquadra han detenido en Barcelona y Mataró a cinco personas, dos de ellas de nacionalidad china, que presuntamente formaban parte de una red dedicada a regularizar de forma irregular a centenares de inmigrantes chinos, según informaron los Mossos d'Esquadra.
Las investigaciones se iniciaron a raíz de las denuncias interpuestas en 2002 por una asociación de pequeñas y medianas empresas del sector téxtil y permitieron detectar talleres de confección ilegales en la comarca del Maresme, donde trabajaban ciudadanos chinos sin permiso de trabajo ni residencia.
Los talleres eran regentados por individuos chinos que obligaban a sus compatriotas, que vivían en el mismo taller, a desarrollar tareas en condiciones de explotación laboral.
Para registrar los talleres, los Mossos requirieron el apoyo de una intérprete de lengua china, A.H.L., más conocida como Teresa, que levantó las sospechas de los investigadores, ya que parecía tener un interés especial en alguno de los tres locales inspeccionados.
Los Mossos investigaron a la sospechosa y averiguaron que era la propietaria de diversas empresas legales mediante las cuales contraba a un número trabajadores chinos muy superior al necesario para el desarrollo de su actividad. Estos contratos fraudulentos servían para conseguir el permiso de residencia y trabajo en España de sus titulares.
También comprobaron que alguna de las personas dadas de alta en sus empresas eran en realidad responsables de talleres de confección clandestinos de Mataró. Así, se estableció una relación directa de A.H.L. con cuatro de estos talles e indirecta con más.
Además, estas personas habían sido detenidas por distintos delitos, en su mayoría contra los derechos de los trabajadores o por venta ambulantes de falsificaciones de CD o DVD, mientras se suponía que estaban trabajando legalmente en estas empresas.
Los Mossos dedujeron que A.H.L. legalizaba fraudulentamente la situación de estas personas a través de sus empresas y les facilitaba el acceso a estas actividades ilegales para disponer de ingresos económicos.
Con la investigación más avanzada, los agentes detectaron una gestoría en Barcelona que colaboraba en las gestiones que A.H.L. realizaba para legalizar a los supuestos trabajadores de sus empresas.
De este modo, en colaboración con la gestoría, el grupo gestionaba empadronamientos y altas y bajas en la Seguridad Social, entre otras gestiones, cobrando por cada una un precio mensual que oscilaba entre los 100 y los 2.000 euros. Para llevar a cabo estas gestiones se utilizaban domicilios y empresas a nombre la implicada.
Para culminar la investigación, los Mossos realizaron el pasado martes cinco entradas y registros en pisos y locales de Barcelona por orden del Juzgado de Instrucción número 2 de Mataró para buscar pruebas que inculparan a los sospechosos.
En el transcurso de este dispositivo, los agentes detuvieron a cinco personas, entre ellas la responsable de la red y su ayudante, A.H.L. y Y.F., ambos chinos, y M.A.L., E.B.P. y R.G.R. Tras prestar declaración ante el juez, A.H.L. ingresó en prisión y el resto quedaron en libergad con cargos.
En el marco de esta operación los agentes han intervenido centenares de copias de documentos extranjeros, todos ellos de origen chino, 118.000 euros en efectivo y abundante documentación. Los Mossos creen que la red tendría capacidad para regularizar a miles de chinos.
Paralelamente, los Mossos registraron siete locales regentados por ciudadanos chinos en Barcelona, Mataró, Calella y Santa Coloma, que tendrían relación con las personas investigadas.
En el local de Mataró encontraron a siete personas trabajando en condiciones de explotación laboral, por lo que el responsable, J.P.G., quedó detenido por un delito contra el derecho de los trabajadores. La investigación continúa abierta y no se descartan nuevas detenciones.