El pequeño que, al parecer, era adoptado, permanece ingresado en la UCI y los padres pasan esta tarde a disposición judicial
PALMA DE MALLORCA, 8 Jun. (EUROPA PRESS) -
Los padres de un niño de 6 años se encuentran detenidos después de que el menor ingresara en estado de coma en la Unidad de Cuidados Intensivos de Materno Infantil del Hospital Son Dureta, tras las graves lesiones que presentaba, supuestamente, fruto de los malos tratos sufridos por parte de alguno de sus progemitores.
Según fuentes de la Jefatura Superior de la Policía de Baleares, el niño, que al parecer, era adoptado, fue trasladado el martes por la noche por su propios padres a una clínica privada de la capital balear con múltiples lesiones, y tras someterse a una exploración por parte de los médicos, se comprobó que se podría tratar de un caso malos tratos.
El grupo de homicidios detuvo a los padres del pequeño, José R.M, de 44 años, y María R.L. de 39 años, que esta tarde pasarán a disposición judicial, tras haberse realizado las primeras diligencias.
Según la versión de la Policía, los hechos se produjeron el martes por la noche, en torno a las 22:00 horas, en un domicilio en la urbanización Es Tolleric, en el municipio mallorquín de Llucmajor, y en un primer momento, los propios padres intentaron reanimarle en la misma vivienda, tras comprobar que la gravedad de las lesiones sufridas.
Esa misma noche, el niño ingresó de urgencia en el hospital de Son Dureta con heridas de extrema gravedad, sumido en un estado de coma, y presentaba un traumatismo craneoencefálico severo, con multiples lesiones y fracturas repartidas por todo el cuerpo, donde permanece ingresado en la UCI.
La investigación la están llevando a cabo agentes del Servicio de Atención a la Familia (SAF) del Cuerpo Nacional de Policía, aunque todavía no se ha podido determinar si fueron los dos progenitores o únicamente uno de los padres los causantes de la paliza que recibió el pequeño.
Fuentes del Hospital de Son Dureta confirmaron hoy que el niño permanece ingresado en la UCI de pediatría de Son Dureta, y continúa muy grave, sin que se hayan producido cambios importantes en su estado de salud en las últimas horas.
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