MADRID, 3 Mar. (EUROPA PRESS) -
La Policía Nacional ha detenido a siete grafiteros, seis en Burgos y uno en Bilbao, por cometer 106 delitos de daños en trenes que se encontraban parados. Los jóvenes han llegado a pintar un total de 4.021 metros cuadrados y la reparación ascendería a 551.218 euros.
Según una nota de la Policía, los siete arrestados pertenecían a un grupo organizado de grafiteros que actuaba, siempre de noche, en Burgos, Vizcaya, Guipúzcoa, Cartagena, Madrid y Valencia. Estos preparaban previamente la "misión" y estudiaban la zona para comprobar si había vigilantes o cámaras de seguridad.
Los agentes averiguaron que, además de los integrantes del grupo, solían acudir grafiteros invitados para realizar las pintadas. De este modo, repartían las tareas a realizar: cuatro o cinco pintaban, uno o dos vigilaban y otro grababa con la cámara o con el móvil para difundir el vídeo en Internet.
22 DELITOS IMPUTADOS AL MISMO GRAFITERO
Uno de los siete arrestados ha sido imputado por 22 delitos, cuyos daños están valorados en 114.835 euros. El joven ya es conocido en el mundo del grafiti por haber participado en otras pintadas de trenes en Alemania, Francia, Reino Unido, México, Argentina y Portugal. También se dedica a cantar rap y a subir vídeos en un canal de Internet.
La operación comenzó en octubre de 2015 cuando los agentes comprobaron que los protagonistas de las pintadas pertenecían a un grupo organizado que actuaba en Orduña (Vizcaya), Zumárraga (Guipúzcoa), Cartagena (Murcia), Madrid, Valencia y Miranda de Ebro (Castilla y León).
