VALLADOLID, 11 Oct. (EUROPA PRESS) -
Agentes de la Policía Nacional detuvieron en Valladolid a dos personas con iniciales J.A.M.S. y J.A.G, de 31 y 29 años, respectivamente, acusados de perseguir en coche a una mujer durante casi una hora con el propósito de atracarla, ya que ésta tenía previsto acudir a un banco para extraer 12.000 euros con los que pagar a los empleados de la empresa de su padre, según informaron a Europa Press fuentes policiales.
Los hechos se iniciaron sobre las 09.00 horas de ayer martes cuando una mujer, al salir con su coche del garaje, observó un vehículo Opel Kadett de color rojo que hacía maniobras extrañas, lo que la hizo sospechar de un posible atraco.
Tras dar varias vueltas por la ciudad tratando de hacer distintos recorridos, la mujer corroboró sus sospechas al comprobar que el vehículo en cuestión la seguía por detrás.
Fue entonces cuando con un teléfono "manos libres' la perseguida llamó a su esposo y éste, de forma acertada, la persuadió para no parar y seguir dando vueltas por la ciudad con el coche.
Seguidamente, el esposo contactó con la sala del 091 y ésta, a su vez, hizo lo propio con la señora, a la que explicó que debía dirigirse hacia un punto concreto donde la estaría esperando la policía para interceptar a sus perseguidores.
Se estableció entonces un dispositivo formando por distintas dotaciones, unas de paisano y otras de uniforme, ambas con distintas funciones. Las primeras tenían por cometido avistar el vehículo sospechoso, facilitando a la Sala del 091 todos los datos posibles, y, por otro lado, las segundas dotaciones se encargarían de evitar la posible fuga de los atracadores.
Así, en la calle Euro los policías de uniforme contactaran con la señora y trataron de interceptar, sin éxito, el vehículo perseguidor, ya que sus ocupantes realizaron maniobras evasivas y lograron darse a la fuga, la cual fue más tarde frustrada por agentes de paisano que colocados estratégicamente obstaculizaron la huida.
Los policías inspeccionaron entonces el vehículo Opel Kadett Seguidamente y se incautaron material suficiente para realizar un atraco con bastantes garantías de éxito, tales como bragas y guantes para ambos, una pistola eléctrica inmovilizadora con su batería y en perfecto estado de funcionamiento, un machete de 25 centímetros de hoja, un destornillador, palanquetas y un juego de prismáticos.
En su declaración a los agentes, la víctima relató que todos los días 5 de cada mes tiene por costumbre acudir a una sucursal bancaria para extraer unos 12.000 euros, dinero para pagar a los empleados de la empresa de su padre, presumiendo por ello que los ahora detenidos tenían perfectamente estudiado el asalto.
Los dos detenidos, que tienen numerosos antecedentes policiales, han sido puesto esta mañana a disposición judicial como autores de un intento de robo con violencia e intimidación.