Creen que la responsabilidad es "a partes iguales" y pedirán una nueva prueba de ADN cuando el cuerpo llegue a Cantabria
SANTANDER, 5 May. (EUROPA PRESS) -
La familia de Borja Obregón lamentó hoy que la justicia española responsabilice a las autoridades judiciales francesas de los problemas y el retraso en la repatriación del profesor -asesinado el pasado mes de octubre y cuyo cuerpo apareció el 11 de marzo en la playa francesa de Biscarrosse-, porque, a su juicio, la justicia de España no puede conformarse con decir que ya ha hecho "lo que tenía que hacer".
En su opinión, la responsabilidad es "a partes iguales" y, en cualquier caso, hacen un llamamiento a las autoridades españolas competentes para que se agilicen los trámites y pueda repatriarse ya el cuerpo.
A punto de cumplirse un mes de la confirmación de que el cadáver aparecido en la playa francesa era el del joven profesor cántabro, el padre de Borja, Bernardino Obregón, convocó hoy a los medios de comunicación para denunciar la situación que están viviendo.
Hasta ahora la familia sólo había hablado ante los medios a través de portavoces, pero los problemas encontrados para repatriar el cadáver han "obligado" al padre a hacer públicas personalmente sus denuncias, según aseguró el alcalde de Castañeda, Miguel Ángel López Villar, quien acompañó a Bernardino Obregón durante la rueda de prensa, celebrada en el Ayuntamiento de Castañeda, en el que reside la familia.
Para la familia, que encargará a la Facultad de Medicina de la Universidad de Cantabria una nueva prueba de ADN cuando el cuerpo llegue a la región, "parece mentira" que pasado casi un mes desde la identificación del cadáver no se haya conseguido repatriar el cadáver.
En palabras de López Villar, la noticia de la aparición del cuerpo, que en su momento se interpretó como motivo de "descanso y sosiego", al final no lo ha sido porque se sigue sin saber cuándo va a acabar todo.
Según denunciaron en la rueda de prensa, aunque el 20 de abril el Juzgado de Instrucción número 1 Medio Cudeyo dictó una diligencia para autorizar a la familia a trasladarse a Burdeos a recoger el cuerpo y trasladarlo a Valdecilla, donde se le practicará una nueva autopsia, el día 21, cuando se personó allí la aseguradora de la familia las autoridades francesas les indicaron que faltaba documentación.
De hecho, aseguraron que hasta el 27 de abril no hubo autorización de la justicia francesa que, días antes, el 24, pidió al padre de Borja que enviará por fax un certificado de nacimiento de su hijo, algo que no entienden por qué no lo realiza directamente la justicia española.
PAPEL DEL GOBIERNO
A su juicio, debería ser el Gobierno español el que se ocupara de repatriar el cadáver desde Francia a España, en lugar de encomendar a la familia la recogida del cuerpo en Burdeos y su entrega posterior en Valdecilla. No obstante, matizaron que no les importa hacerlo con tal de que el cuerpo de Borja esté cuanto antes en Cantabria, aunque después haya que esperar de nuevo aquí a que se realice la autopsia.
Finalmente, tuvieron palabras de agradecimiento para el delegado del Gobierno en Cantabria, Agustín Ibáñez, del que destacaron su trabajo "excelente" y las "constantes" conversaciones que ha mantenido para intentar "agilizar" el proceso.
