La familia de una mujer gallega no sabe qué pasó con la investigación de su asesinato una vez transcurridos dos años

Actualizado: jueves, 4 mayo 2006 14:05

Marina Boo fue estrangulada y quemada en la parte trasera de la antigua cárcel de Orense en el año 2004 y el caso se archivó en 2005

ORENSE, 4 May. (EUROPA PRESS) -

La familia de Marina Boo, una mujer de 35 años que fue estrangulada y quemada en la parte trasera de la antigua cárcel de Orense en el año 2004, no sabe qué pasó con la investigación de su asesinato cuando han trancurrido dos años del mismo. El caso se archivó a finales de 2005 y la familia cree que la investigación "no avanzó" por ser la víctima prostituta y drogadicta

El 17 de mayo de 2004, un viandante que había salido a pasear con su perro, encontró el cuerpo calcinado de Marina Boo Outomuro en la parte trasera de la antigua cárcel de Orense; la víctima, de 35 años de edad, prostituta y drogadicta, había sido estrangulada con una bolsa antes de ser quemada.

Dos años después, su familia no sabe qué pasó con la investigación, aunque creen que el caso "le vino grande" a la policía, y que el hecho de ser ella "quién era", también pudo ayudar a que la búsqueda se diluyera en el tiempo.

"Parece que la culpable de que la hayan matado es ella, porque era prostituta y drogadicta, y la juzgaron como tal, no como a una persona", aseguró a Europa Press Televisión la hermana de la víctima, María Jesús Boo Outomuro. Según dijo, esa puede ser una de las razones por las que "no se avanzó mucho en la investigación", porque era "una persona de la calle y se dedicaba a la mala vida".

SOSPECHOSOS

A los pocos días del hallazgo del cuerpo de Marina, fue detenida una persona que esa noche había estado con ella y cuyo rostro aparecía en la cámara de seguridad de un cajero cercano, aunque esta persona fue puesta en libertad a los tres días.

Meses más tarde, en septiembre de 2004, tres personas del entorno de la víctima fueron detenidas por su presunta relación con el caso, entre ellos, el propio hermano de Marina.

"Parece ser que encontraron sangre en el maletero del coche de uno de los detenidos, pero no era una prueba concluyente; incluso llegaron a detener a mi hermano, que me parece lo peor de lo peor", explicó María Jesús Boo.

Asimismo, señaló que en el dossier del caso, se dice textualmente: "en su interior --en el maletero del coche-- se encuentran dos torundas ligeramente impregnadas en sangre". Además, también recogía que "se ha evidenciado la presencia de sangre humana en las dos muestras analizadas".

Al parecer, no pudo comprobarse que la muestra de sangre perteneciera a ninguno de los detenidos, por lo que se barajaba la posibilidad de que perteneciera a otra persona involucrada en el caso. Así, los tres detenidos fueron puestos en libertad a los pocos días de su detención.

UN ASESINO ESTÁ SUELTO

Después de dos años, María Jesús Boo pide "que encuentren al que mató a Marina". "Un asesino está suelto; mi hermana no se mató, ella no se quemó; sólo pensarlo pone los pelos de punta; a un perro no se le hace eso", dijo María Jesús.

La hermana de la víctima, una vez que se levantó el secreto de sumario, que a Marina la habían estrangulado. "Parece ser que la estrangularon con una bolsa, y después la quemaron", aseguró María Jesús Boo. "Que los agarren, que a mi hermana ya nadie le devuelve la vida, pero le daría un poco de tranquilidad a mi madre, que no la tiene, que cada dos días tenemos que llevarla a urgencias porque se encuentra morir", añadió.

PARECE QUE SÓLO ES "UN NOMBRE EN UN CARTEL"

María Jesús Boo no puede dejar de mostrar su enfado con "muchos políticos" que en el entierro de Marina "vinieron a hacerse la foto, y mi hermana pasó a ser una estadística, y al final se dedicaron a ponerla en un cartel" cuando hay algún acto en memoria de víctimas del maltrato. "Eso es, un nombre en un cartel", afirmó.

Así, explicó que Marina Boo había sido víctima de malos tratos durante mucho tiempo. "Cuando era maltratada nunca le hicieron caso, porque se lo debía de merecer, vaya", denunció su hermana.

Su ex marido, al que la joven asesinada había denunciado por malos tratos, sería detenido a finales de 2004 como presunto autor del asesinato de su mujer, Rosa María Pinto Ocampo, pero la policía descartó desde un primer momento su implicación en la muerte de Marina Boo Outomuro.

Por último, la hermana de Marina pidió al responsable de la seguridad ciudadana de Orense, el subdelegado del Gobierno, "al que no he visto en mi vida, que piense en la familia, porque aunque mi hermana era una prostituta y una drogadicta, era una persona y tenía una familia".

CAUSA ARCHIVADA

A finales de 2005, la causa fue archivada al no poder encontrar ninguna prueba que pudiera relacionar a alguno de los sospechosos con su muerte. Un archivo contra el que hay presentado un recurso de apelación y que está pendiente de resolución por parte de la Audiencia Provincial de Orense.