SEVILLA 5 Sep. (EUROPA PRESS) -
El agente de la guardia civil que en la madrugada del martes resultó herido grave tras recibir un impacto en la cabeza con una piedra de más de dos kilogramos cuando participaba en una operación antidroga en Alcalá del Río (Sevilla) continúa en estado grave en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital Virgen Macarena, pero evoluciona favorablemente.
Según el parte médico del centro sanitario remitido a Europa Press, el agente "está consciente" y evoluciona dentro de la gravedad de su situación, ya que presenta un traumatismo por el que tuvo que ser operado ayer de urgencia al ingresar en el hospital.
Los hechos acontecieron en la madrugada de ayer en un barrio de Alcalá del Río, cuando la Guardia Civil desplegó un dispositivo antidroga para localizar un punto de venta de estupefacientes. Los agentes divisaron a dos conocidos delincuentes y éstos se dieron a la fuga al recibir el alto. Uno de los aludidos fue inmovilizado por los agentes, pero el otro huyó siendo perseguido por un agente que, al momento, fue testigo del impacto de una piedra de grandes dimensiones en la cabeza del agente ahora ingresado en el hospital Virgen de Macarena. Tras ello, el agente desistió de la persecución y atendió a su compañero.
De momento, los dos detenidos, identificados como A.B.P. de 37 años y M.H.M de 29, pasaron a disposición judicial, mientras cuentan con amplios antecedentes por atentado contra agentes de la autoridad y delitos de robo a mano armada. En el momento de la detención, al primer detenido se le encontró entre las ropas 95 papelinas que resultaron ser cocaína y heroína.
Aunque la Guardia Civil mantiene abiertas todas las líneas de investigación no se descarta ninguna posibilidad, pero cobra fuerza la hipótesis de que una tercera persona lanzara la piedra que hirió a este agente.