Los hijos de la fallecida bajo una marquesina de autobús en Illescas piden justicia y que se revisen las paradas

Yolanda, una belga de 54 años, murió en Illescas (Toledo) aplastada después de que un autobús chocará contra la marquesina

Los hijos han cobrado una indemnización de la compañía de autobuses, pero quieren que se reconozca el estado inadecuado de las paradas

Europa Press Nacional
Actualizado: martes, 1 agosto 2006 13:27

MADRID, 1 (EUROPA PRESS) -

El próximo día 6 de agosto se cumple un año del trágico y triste suceso que acabó con la vida de Yolanda Lambert aplastada por la marquesina de una parada de autobús en Illescas (Toledo) y sus hijos siguen pidiendo justicia y que los organismos competentes reconozcan que todas estas instalaciones de transporte de Castilla-La Mancha son inadecuadas y "se encuentran en mal estado".

Tras lo ocurrido a su madre, sus hijos temen que en cualquier momento otro ciudadano pueda morir mientras espera el autobús, como sucedió con su madre, una belga que fue al pueblo el 6 de agosto de 2005 para ver a una amiga y que salió de Illescas sin vida, después del suceso. "Están poniendo a cientos, a miles de personas en peligro todos los días", criticó Gabriel, uno de los hijos de 25 años.

Aunque los cinco hijos recibieron una indemnización de la compañía de seguros de la empresa de autobuses Continental-Auto, desde el primer momento Gabriel y Philippe, de 18 años y que presenció el suceso hace un año, actúan como portavoces de la familia y siguen luchando y solicitando justicia.

Su objetivo es que las autoridades del pueblo y la Consejería de Obras Públicas de la Junta de Castilla-La Mancha reconozcan el estado inadecuado de las marquesinas.

Consideran que la dignidad de su madre "es más importante" que una cantidad económica, así que decidieron seguir adelante independientemente de la cantidad de dinero recibida. "No nos mueve la cantidad económica", insistió Gabriel, siempre con el recuerdo de su madre en la mente.

Al tiempo, lamentaron que desde la consejería se dieron explicaciones de que las marquesinas de la región estaban en "buen estado sin haber hecho una mínima investigación". Pensaron que "era una falta de respeto a nuestra madre como persona".

UNA TRAGEDIA Y CUATRO DÍAS DE INFIERNO

Los hijos recuerdan la situación en la que pereció su madre, "una persona que no tenía ninguna culpa y sólo estaba esperando el autobús debajo de una marquesina". "Fueron cuatro días de infierno", lamentó Gabriel cuando relató los acontecimientos. "El autobús, que entraba en la parada, dio un golpe a la marquesina, que se desplomó automáticamente y aplastó a mi madre".

Su madre quedó atrapada bajó la estructura. Dos de los hijos de Yolanda --Benjamín que entonces tenía 17 años y Philippe, de 19-- presenciaron la escena, pero por fortuna no estaban debajo de la marquesina. "Mis hermanos intentaron levantar la marquesina pero no pudieron, y todo esto con la impotencia de que mi madre estaba gritando debajo y estaba pidiendo ayuda", dijo Gabriel.

El chico lamentó que "nadie pusiera unos psicólogos" a sus hermanos tras presenciar semejante escena y perder en unos segundos a su madre.

PIDEN QUE LA JUNTA RECONOZCA EL MAL ESTADO DE LAS MARQUESINAS

Gabriel y sus hermanos han dejado todo el asunto en manos de su abogado y quieren que desde la Junta se reconozca que "las marquesinas están en mal estado porque la profundidad no es suficiente para aguantar el peso". Ahora el asunto se encuentra en la vía de la contencioso-administrativo.

Los hijos de la fallecida lamentaron que la Junta no "haga nada" en el asunto y consideraron que, además, tienen la culpa de lo que pasó. Ha pasado un año, ellos tienen un estudio pericial de un arquitecto técnico que indica que los "pernios no están provistos de ninguna garrota de anclaje" y se llega a la "conclusión de que a tracción la placa no trabaja perfectamente".

Desde España, Gabriel se sintió en la obligación y la necesidad, tras el suceso, "de mover todo y hacer un seguimiento de la situación". "A día de hoy se cumple un año y es patético que no hayan salido a la luz" los responsables y "asuman su parte de culpa", concluyó.

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