LAS PALMAS 18 Jul. (EUROPA PRESS) -
Finalmente, ascienden a 45 los inmigrantes irregulares rescatados ayer en aguas de Fuerteventura cuando su embarcación se encontraba a la deriva, según comunicaron a Europa Press fuentes de la Guardia Civil. La primera llamada de auxilio se produjo sobre las 16 horas de ayer, cuando un ocupante de esta embarcación, en la que viajaban 6 bebés y 3 mujeres embarazadas, contactó desde un móvil con el 112. El hombre declaró haber partido de El Aaiún dos días antes y que el motor de la patera se encontraba averiado, por lo que estaban perdidos en medio del océano.
De inmediato, se activó un amplio dispositivo de búsqueda aéreo y marítimo hasta que a media tarde un helicóptero de la Guardia Civil localizó la patera en alta mar, a unos 24 kilómetros de distancia del Faro de La Entallada.
La Patrullera "Tinecheyde" de la Guardia Civil acudió a su rescate y cuando realizaba la maniobra de abordamiento, los agentes observaron cómo en el interior de esta embarcación, de seis metros de eslora y con exceso de pasaje, había varios bebés con sus respectivas madres.
Rápidamente, los guardias civiles rescataron en primer lugar a los menores y a sus madres, además de a las mujeres embarazadas; por último a los varones adultos. Durante la hora y media que duró su traslado hasta el Muelle de Gran Tarajal, los agentes prestaron la primera asistencia humanitaria a los bebés hasta su llegada a tierra, que se produjo sobre las 21' 10 horas (hora local).
Los 45 inmigrantes rescatados resultaron ser todos de origen subsahariano, 27 varones adultos (entre los cuales había un nigeriano y un sudanés que acompañaban a sus respectivas esposas e hijos), 12 mujeres adultas ( 6 madres con sus hijos y otras 3 en avanzado estado de gestación) y 6 menores de corta edad. Estos menores resultaron ser dos niños (de 4 meses y de 1 año) junto a cuatro niñas (de 8 meses, 1 año, 2 años y 3 años),quienes fueron trasladados al Centro de Acogida de la Cruz Roja en Fuerteventura.
Las tres mujeres embarazadas (de entre los 20 y 22 años, naturales de Nigeria, Sudán y Mali, respectivamente) fueron trasladadas hasta el Hospital General de Fuerteventura junto a una de las madres que sufrió un desvanecimiento y se desmayó mientras era desembarcada en el mismo muelle, lo que impidió ser identificada.