BARCELONA 1 Mar. (EUROPA PRESS) -
Los Mossos d'Esquadra investigan la posible relación entre la muerte de una prostituta y la supuesta violación de otra en la montaña de Montjuïc de Barcelona. El pasado 15 de febrero apareció una mujer brutalmente apaleada y tres días después falleció. Por otra parte, la misma noche, otra prostituta denunció haber sido violada en la misma zona.
Por el momento hay un detenido, que está en la cárcel tras pasar a disposición judicial, Abded A., de 40 años, origen argelino y sin domicilio conocido, aunque sólo se le imputa la presunta violación de una mujer apodada 'Maricarmen', una prostituta de la zona.
Sobre las 3.30 horas del miércoles 15 de febrero alguien avisó a los Mossos que había una mujer tendida en el suelo y ensangrentada en un parque frente al número 20 del paseo Montjuïc, según informaron fuentes policiales. La zona es concurrida por prostitutas, indigentes y toxicómanos.
La mujer, de unos 50 años y apodada 'la Maña', por su origen aragonés, o 'Isabel', tenía el pelo largo y blanco. Fue trasladada inmediatamente al Hospital del Mar, ya que tenía la cara desfigurada, abundante sangre en la boca y la cabeza y estaba inconsciente.
Una vez en el centro quedó ingresada muy grave en la Unidad de Cuidados Intensivos, donde la operaron de sus graves lesiones en el cráneo. Finalmente, cuatro días después, falleció.
La misma noche del 14 al 15 de febrero, sobre las 3.10 horas, los Mossos recibieron otro aviso procedente de la misma zona. Una prostituta, 'Mari Carmen', había acudido a la narcosala Baluard, en la zona de Drassanes y muy cerca del parque de Montjuïc, como hacía habitualmente, ya que era toxicómana. Allí coincidió con Abded A., al que conocía de vista.
El hombre le ofreció cocaína y se fueron a unas obras en la calle Carrera, junto al Paral·lel y muy cerca de la narcosala. Según la versión de la prostituta, el hombre le habría propuesto mantener relaciones sexuales. Pese a su negativa, el sospechoso la habría forzado. Después, desesperada, la mujer volvió a la sala Baluard y desde allí avisaron a la Policía.
Los Mossos empezaron a buscar al individuo por la zona y le encontraron en el mismo lugar donde habría tenido lugar la violación. Éste admitió haber mantenido relaciones sexuales con la mujer, pero aseguró que fueron consentidas. Sin embargo, el juez decretó su ingreso en prisión.
Ahora los agentes intentan averiguar si hay relación entre ambos delitos, por lo que tratan de esclarecer las últimas horas de la mujer fallecida.
Su identificación fue dificultosa, ya que la prostituta no llevaba encima ningún documento identificativo. Algunos vecinos del Raval y el Poble-sec la conocían, así como compañeras prostitutas. La mujer ejercía sobre todo en la Rambla y la calle Sant Ramon y haría varios años que llegó a Barcelona.