BARCELONA 11 May. (EUROPA PRESS) -
La mujer a la que una mossa d'Esquadra abofeteó el pasado 4 de abril en la comisaría de Les Corts de Barcelona, agresión denunciada días después por la división de Asuntos Internos de la Policía autonómica, salió al día siguiente de las dependencias policiales con 38 hematomas repartidos por todo su cuerpo, según confirmaron a Europa Press fuentes judiciales.
La grabación de las cámaras de Asuntos Internos sólo mostraba el momento en que una agente propinaba a la detenida, que estaba esposada, un bofetón que la lanzó al suelo, pero las imágenes tomadas por el novio de la joven horas después de salir de comisaría demuestran que salió de Les Corts con numerosas contusiones, según avanzó hoy 'El Periódico'.
La víctima, Elena P., de 23 años y nacionalidad rusa, fue examinada por un médico del Hospital del Mar de Barcelona poco después de su detención y su informe sólo recogía el dolor en las muñecas que la joven sufría a consecuencia de las esposas. Sin embargo, el parte médico elaborado al día siguiente por un doctor del Hospital Vall d'Hebron contabiliza hasta 38 hematomas en rodillas, caderas, hombros, espalda, cara y zona lumbar.
Elena P., que reside en España desde los 16 años, fue detenida la madrugada del pasado 4 de abril cuando regresaba de celebrar su 23 cumpleaños. No encontraba las llaves de su casa, así que empezó a aporrear la puerta de su apartamento, que comparte con otras personas, para que la dejaran entrar.
Según relató hoy a Europa Press el abogado de la joven, Carlos Zanón, minutos después llegó una pareja de Mossos d'Esquadra, un chico y una chica, que empezaron a burlarse de ella. La víctima se molestó y les replicó con contundencia y los agentes acabaron arrestándola por atentado contra la autoridad. En el mismo ascensor, según la joven, empezaron a abofetearla.
De camino a la comisaría la joven se quejó de dolor en las muñecas por culpa de las esposas y los agentes los condujeron al Hospital del Mar, donde un parte médico de las 2 de la madrugada sólo deja constancia de dichas molestias. A continuación, la llevaron a comisaría, donde el vídeo de Asuntos Internos muestra que fue abofeteada por una mossa.
Ya en la sala de registros, la joven recuerda que varios agentes empezaron a burlarse de ella, de su acento y de su ropa y que le rompieron la chaqueta, el pantalón y el sujetador. Según su abogado, la víctima es de complexión delgada, mide 1,60 metros y pesa 50 kilos y es una chica "muy tímida" que ha sufrido mucho como consecuencia de lo ocurrido.
Cuando sobre el mediodía del día siguiente Elena P. salió de comisaría, su novio la pasó a recoger y la llevó al Hospital Vall d'Hebron, donde el parte médico habla de contusiones en diversas partes de su cuerpo. A continuación, se dirigió a presentar la denuncia a la comisaría de Sant Andreu, donde se topó de nuevo con la agente que la había detenido.
La mossa que supuestamente cometió la agresión está suspendida de empleo y sueldo desde el pasado abril, cuando el director general de la Policía de la Generalitat, Rafael Olmos, hizo pública la agresión a Elena P. y al joven Rubén P.M., un caso ocurrido días antes y por el que han sido imputados un cabo, un mosso y dos agentes en prácticas.