SEVILLA 31 Ago. (EUROPA PRESS) -
F.L.M., el vecino de Osuna (Sevilla) que presuntamente disparó el pasado sábado a su mujer y a su hija causándoles la muerte, "evoluciona favorablemente dentro de su gravedad" en planta del Hospital Virgen del Rocío, en su cuarto día de postoperatorio, tras perder el ojo izquierdo como consecuencia del disparo con el que intentó suicidarse antes de ser detenido por la Guardia Civil.
Según el parte médico remitido a Europa Press por la dirección médica del Virgen del Rocío, el presunto parricida, que fue trasladado la misma noche del sábado al hospital de Traumatología del Virgen del Rocío desde el hospital comarcal de Osuna --donde fue tratado en un primer momento-- sufre "graves lesiones faciales múltiples" como consecuencia de "herida por arma de fuego con pérdida de sustancia".
En concreto, el paciente, que llegó "intubado y conectado a ventilación mecánica", sufre "pérdida del globo ocular izquierdo y fractura del maxilar izquierdo", por lo que los facultativos del Virgen del Rocío le sometieron a una intervención quirúrgica para extraer el glóbulo ocular izquierdo, reducir la fractura y realizar "suturas múltiples para la reconstrucción facial" del paciente.
El doble crimen de Osuna ocurrió pasadas las 21.00 horas del pasado sábado cuando F.L.M., albañil de 58 años sobre el que pesaba una orden de alejamiento de su esposa, se presentó en el domicilio de su hija, donde se había refugiado su mujer, y presuntamente disparó contra ambas.
Según se conoce, con posterioridad el agresor abandonó esta vivienda y se refugió en su domicilio, donde intentó quitarse la vida disparándose momentos antes de que agentes de la Guardia Civil irrumpieran en el inmueble para proceder a su detención.