VIGO, 3 May. (EUROPA PRESS) -
Más de 5.000 trabajadores del sector del metal salieron hoy a la calle en Vigo, en el primer día de huelga indefinida convocada por los sindicatos tras romperse las negociaciones del convenio colectivo, y provocaron el colapso en varias zonas de la ciudad, al cortar el tráfico, quemar contenedores y papeles en medio de las calles.
Los trabajadores salieron esta mañana de sus respectivos centros de trabajo en varias manifestaciones procedentes de diferentes puntos de la ciudad, como los astilleros de Teis, Bouzas, o la zona de Balaídos, en dirección a la Praza do Rei, frente al Ayuntamiento, con el fin de asistir a una asamblea convocada por los sindicatos CCOO, CIG y UGT.
Durante los trayectos, algunos de los participantes en las marchas prendieron fuego a contenedores, neumáticos o pilas de periódicos gratuitos que en ese momento estaban siendo distribuidos por las calles. Según confirmaron a Europa Press fuentes de los bomberos, el servicio de extinción tuvo que sofocar decenas de pequeños incendios en colectores de basura en varias zonas de la ciudad, como Gran Vía, Nicaragua, Pizarro o Traviesas.
Aunque, según la Policía Local, no se ha confirmado que haya habido personas heridas, se registraron numerosos daños materiales a mobiliario urbano, así como a algunos vehículos que pretendían circular por las zonas donde se estaban movilizando los manifestantes, como en la Gran Vía, donde varios individuos volcaron una furgoneta o el túnel de la plaza de España, en el que varias personas causaron daños en otro vehículo de una empresa de fontanería. Además los manifestantes cortaron el tráfico en los accesos a la ciudad, como las salidas de la autopista AP-9 o la Avenida de Madrid.
De hecho, los propios líderes sindicales hicieron una llamamiento a la "responsabilidad" y denunciaron que las acciones violentas eran emprendidas por algunas personas que "no tienen nada que ver con el sector". En todo caso, advirtieron de que se organizarían en grupos de piquetes informativos para, a lo largo del día de hoy, vigilar que todas las empresas afectadas se sumen a la huelga.
ASAMBLEA DE TRABAJADORES
La Praza do Rei, frente al Ayuntamiento de Vigo, fue escenario esta mañana de una asamblea a la que asistieron unos 5.500 trabajadores, y en la que los sindicatos explicaron los motivos por los que se rompieron las negociaciones con la patronal, entre ellos, las diferencias en torno a la subida salarial, el porcentaje de empleos fijos, la flexibilidad en la bolsa de horas de trabajo o la regulación de las mutuas.
Según los sindicatos, el seguimiento de la huelga en la ciudad de Vigo es del cien por cien, mientras que en el resto de la provincia de Pontevedra es del 95 por cien. Además, aseguran que el paro ha afectado también a los grandes astilleros que, aunque tienen convenio propio y no estaban llamados a la huelga, la mayor parte de su producción depende de la industria auxiliar, que sí participa en el paro.
De momento, la patronal no se ha pronunciado ni ha hecho una nueva oferta, aunque no se descarta que pueda haber un encuentro en las próximas horas, con el fin de continuar con la reunión de ayer (que acabó sin acuerdo tras nueve horas de negociación), y el delegado de la Consellería de Traballo, Pedro Borrajo, está haciendo gestiones en ese sentido.