BARCELONA 20 Sep. (EUROPA PRESS) -
El subdelegado del Gobierno central en Barcelona, Eduard Planells, negó hoy que hace varios años cobrara por conceder documentos para inmigrantes legales a uno de los jefes de la mafia rusa detenidos en junio de 2005 por blanqueo de capitales.
En una entrevista en TV3 recogida por Europa Press, Planells aseguró que "nunca he cobrado ni un céntimo de nadie ni he hecho gestiones fuera de la ley". Según informó hoy 'El Mundo', Planells está siendo investigado por la Policía Nacional para descubrir si cobró dinero del 'capo' ruso Malchas Tetruashvili para regularizar a miembros de la mafia rusa a través de contratos de hostelería.
A Planells no le consta que esté siendo investigado por la Policía y la Audiencia Nacional y denunció que se "aproveche" su cargo de subdelegado para criticar a "alguien del Gobierno actual", "porque todo esto son hechos pasados". "Es una infamia intolerable", afirmó, y advirtió que está estudiando la posibilidad de emprender acciones legales contra el citado periódico.
Según explicó, a principios de 2001 --cuando hubo los encierros de inmigrantes en las iglesias de Barcelona--, Tetruashvili se reunió con el entonces subdelegado, David Bonet, y Planells le acompañó. En aquel momento, Planells era el coordinador de servicios de la Subdelegación de Barcelona y responsable de la Oficina de Extranjeros de Barcelona.
Tetruashvili se presentó como representante de una ONG de amistad hispanorrusa que pretendía llevar mano de obra de calidad para trabajar en la hostelería catalana. En aquella primera "reunión informativa" se le explicaron los "mecanismos" de los procesos de regularización, según Planells. Además, "en paralelo el Gremio de Restauración de Barcelona apoyaba la acción, porque faltaban muchos trabajadores".
Posteriormente, el entonces conseller de Trabajo, Industria y Turismo, Antoni Fernández Teixidó, acudió a la Subdelegación porque la embajada española en Moscú ponía "ciertas dificultades" para la legalización de los trabajadores y les reclamaba una carta de presentación, una acreditación, de la supuesta ONG de Tetruashvili. Planells mismo firmó a mitades de 2001 aquella "pequeña carta" y se la entregó en persona a Tetruashvili. Desde entonces ya no lo vio más y sólo mantuvieron contacto telefónico.
SANCIONES DE INSPECCIÓN DE TRABAJO.
En 2002 tuvo lugar un proceso judicial, que se archivó, de la Inspección de Trabajo contra Tetruashvili por las contrataciones de estos inmigrantes. Finalmente, el conflicto se saldó con "sanciones económicas importantes" que el ciudadano ruso acabó pagando.
Tras esta resolución, la Subdelegación pidió a Tetruashvili que les devolviera la credencial y que no la utilizara más. En febrero de 2003, el ahora detenido contestó que "no hizo ningún mal uso" de la credencial y que ésta se encontraba en la embajada española en Rusia.
Según Planells, desde entonces no tuvo más noticias de Tetruashvili hasta que fue detenido en junio de 2005. Además, el actual subdelegado explicó que "casi todos" los expedientes presentados fueron denegados, ya que la ONG "pretendía hacer de intermediario, y nuestra legislación no lo prevé".
TEIXIDÓ NO SOSPECHABA DE TETRUASHVILI.
Por su parte, el diputado de CiU Antoni Fernández Teixidó también se desvinculó totalmente de la mafia rusa. Sin embargo, aseguró que conocía a Tetruashvili porque pertenecía a "una familia muy conocida de la comunidad sefardí de Cataluña" y tenía alguna relación "alejada" con él a través de su familia política, aunque coincidían "muy pocas veces en la comunidad".
También en declaraciones a TV3 recogidas por Europa Press, aseguró que nunca tuvo la "percepción" de que Tetruashvili "tuviese ningún tipo de contraindicación". En este sentido, afirmó que "había comprobado que las seis o siete empresas con las que trabajaba eran legales".
Respecto a la carta con membrete del Parlament que él mandó a Tetruashvili, Teixidó explicó que asistió como diputado a una cena en casa del ciudadano ruso en 2004, donde se habló de "política, filantropía e historia bíblica".