BARCELONA 24 Feb. (EUROPA PRESS) -
Los tres detenidos por su implicación en la muerte de una mujer la madrugada del pasado domingo en su piso de Mataró (Barcelona) pasarán hoy por la mañana a disposición judicial, según informaron a Europa Press fuentes policiales.
Los Mossos d'Esquadra detuvieron el pasado martes a tres personas presuntamente relacionadas con la muerte de Patrocinio H.O., de 53 años, la madrugada del sábado al domingo.
Durante la mañana detuvieron a dos hombres, uno de ellos Francisco M., y por la tarde detuvieron a la pareja de éste, Mònica A.. Según parece, la pareja vivía en el mismo bloque que la víctima, en el 1º 2ª del número 9 de la calle Sant Valentí.
Ninguno de ellos pertenece al núcleo familiar de la víctima, aunque sí son vecinos del barrio, según informó a Europa Press un portavoz de la Policía autonómica.
Fuentes de la investigación descartaron que el móvil fuera la violencia de género y señalaron que están analizando otras causas. Asimismo, señalaron que la zona en la que viven los presuntos implicados y la víctima es un barrio degradado con problemas económicos y de drogas en el que son habituales las diferencias vecinales.
El cadáver de Patrocinio H.O. fue hallado en la medianoche del sábado, cuando los Bomberos se presentaron en un domicilio de la calle Sant Valentí de Mataró para apagar un fuego que los asesinos prendieron, supuestamente, para ocultar los rastros del crimen. Al parecer, el cuerpo apareció cubierto de heridas de arma blanca y prácticamente degollado.
Los vecinos de la mujer, una viuda con tres hijos, apuntaron ayer que el móvil del crimen podría ser un ajuste de cuentas, contra ella misma o una de sus hijas. Según algunos vecinos, Patrocinio H.O. "bebía mucho" y se podría haber creado "enemigos" por este motivo.
Sin embargo, otros vecinos explicaron que la mujer mantenía buenas relaciones con ellos y "no creaba problemas en el barrio". En cambio, indicaron que su hija mayor podría tener problemas de drogadicción, lo que habría provocado una "venganza" contra ella o su madre.
La mujer era viuda desde hacía cinco años y vivía sola en el piso 5º 1ª del número 9 de la calle Sant Valentí. Aunque tenía dos hijas y un hijo, según parece, solo mantenía una relación cotidiana con su hijo. Además, tampoco se le conocía pareja alguna.
Se da la circunstancia de que los Bomberos tuvieron que forzar la puerta, que estaba bien cerrada y no presentaba señales de haber sido previamente forzada por ningún intruso. En este sentido, se especula que la víctima conocía a su agresor o agresores, ya que éste entro con una llave o llamando a la puerta, lo que apuntala la teoría de que los asesinos fueran vecinos de la mujer.