Pedro Serrahima, director general de Globalia
GLOBALIA
Actualizado: viernes, 23 junio 2017 14:31


Elimina puestos directivos en Halcón y sube un escalón a Globalia Corporate Travel como empresa independiente

SEATTLE, 23 Jun. (EUROPA PRESS) -

El director general de Globalia, Pedro Serrahima, ha asegurado que si tuviera ahora dinero invertiría en el capital del grupo turístico, inmerso actualmente en un plan de cambio, de al menos "dos o tres años", enfocado a su renovación tecnológica de la compañía y a un cambio en la mentalidad del negocio para afrontar nuevos retos.

"Es una joyita que ha funcionado por la genialidad de Juan José Hidalgo y donde se han hecho las cosas muy bien, pero que necesita reinventarse", ha afirmado Serrahima en el marco de la entrega a Air Europa del octavo 787 'Dreamliner' en Seattle, Estados Unidos.

Serrahima, que procede del sector de las telecomunicaciones, se incorporó a Globalia en septiembre de 2016 como director general de la mano de Javier Hidalgo, ya como primer ejecutivo y consejero delegado del grupo turístico familiar, tras la venta de Pepephone a MásMóvil por 158 millones de euros.

Ante una eventual venta del 9,9% del capital que ostentaba Banco Popular en Globalia, ahora en manos de Banco Santander, Serrahima cree que "no habrá problema para encontrar un comprador", pero matiza que las relaciones con los inversores las lleva el consejero delegado directamente.

"Es una participación que vale mucho dinero y todas las empresas tienen deudas con los bancos, eso no tiene por qué complicar la relación como inversor. Yo no tengo ahora dinero pero si lo tuviera sí que compraría ahora una participación", ha afirmado el director general de Globalia.

Entre los accionistas minoritarios de Globalia figuran también Unicaja (7%), Abel Matutes (5,14%) --que adquirió su parte al hijo de Hidalgo--, su hermano Juan Antonio (9,1%), sus hijas (María José y Cristina, con un 5,14% cada una) y su mujer, Avelina Gutiérrez (5%), además de la Fundación Tatiana Pérez de Guzmán el Bueno (2%). Juan José Hidalgo controla el 51% del grupo turístico, siendo su primer accionista.

SALIR A BOLSA NO ESTÁ SOBRE LA MESA.

La nueva dirección no tiene sobre la mesa la salida a Bolsa. "Igual dentro de dos o tres años puede ser una buena idea pero ahora mismo no", ha reconocido Serrahima, argumentando que la prioridad de la compañía ahora es la evolución tecnológica y el cambio del punto de vista del modelo de negocio.

Para Serrahima los cambios necesarios en Globalia son al 50% tecnológicos --con la implantación de sistemas más avanzados en los que ya se está invirtiendo-- y de mentalidad.

"Cambiar la mentalidad es gratis pero requiere un tiempo y a veces un pequeño sacrificio para luego coger el ritmo", ha apuntado.

ELIMINA PUESTOS DIRECTIVOS EN HALCÓN.

Una de las primeras medidas aplicadas por la nueva dirección es el cambio de organigrama en Halcón Viajes y Viajes Ecuador, "más plano", con la eliminación de "unos cuantos puestos directivos" y la salida, entre otros, de José María Hoyos, que ocupaba la dirección general de la minorista, que quedará sin cubrir, al menos de momento.

La nueva estructura de Halcón se reparte en cuatro direcciones: dirección comercial y de oficinas (Miguel Osuna); dirección de operaciones (Miguel de Lara); dirección de grupos y concursos liderada (Juanjo Hernández) y la dirección de Globalia Corporate Travel (Ignacio González), según figura en una carta remitida por Serrahima a los empleados de la compañía recientemente.

Además, se reducen a tres las zonas de área: Cataluña-Levante, Norte, Aragón y Andalucía (Joan Martínez); Madrid que incluye la región madrileña, Castilla-La Mancha, Castilla y León, Extremadura, Galicia y Asturias (Santiago Méndez) y las islas dirigida desde Palma (Cristóbal Zamora).

MODELO MÁS SENCILLO Y TRANSPARENTE.

En la carta, Serrahima explica a los trabajadores que Halcón debe cambiar hacia "modelos muchos más sencillos y mucho más transparentes, humanos y tecnificados donde el valor mucho más allá del precio". El objetivo es simplificar su estructura par aplanar la cadena de mando y acercar los órganos de dirección a las oficinas.

Cuestionado por la salida de Hoyos y estos cambios, Serrahima ha defendido que se ha dado la vuelta a Halcón eliminando capas de dirección para una estructura más sencilla y reforzando la red de oficinas en contacto directo con el cliente, lo que "no implica cambios en las marcas del grupo".

Así, ha subrayado que al negocio dirigido a empresas, Globalia Corporate Travel, se le ha subido un escalón a nivel de grupo como empresa independiente para aprovechar las ventajas para su expansión al contar también con una cadena hotelera, una red de agencias y transporte y una aerolínea propia que cubre 20 destinos en América.

"La mejor experiencia de un viaje es que si hay algún problema, y hay que reclamar, la empresa responde en toda la cadena de valor, desde que estás en la agencia y minorista que te vende el viaje, a la aerolínea, el hotel, el señor que mueve tus maletas y el que organiza las excursiones, lo que genera confianza", ha añadido.

Para Serrahima las empresas que están detrás para dar servicio a todo esto deben tener la rentabilidad fuera pero siempre potenciando el negocio. "Es decir, 50 euros que vengan de un hotel o de una agencia de viajes, valen 500 veces más que 50 euros que vengan de algún servicio mayorista o a terceros. Si una empresa sabe cómo es y cómo quiere ser y, sus empleados también lo sabemos, el cliente lo percibe y funcionará", ha concluido.