MADRID, 30 Dic. (EUROPA PRESS) -
El 70% de los trabajadores españoles está a favor de trasladar a los lunes o los viernes las festividades que caen entre semana, según un informe realizado por Randstad.
No obstante, el 42% de los encuestados pone como objeción que las fechas más significativas del calendario laboral, como la Navidad, se mantengan en su día original para no trastocar el sentido de la celebración.
Así, solo el 30% de los trabajadores españoles está dispuesto a seguir con el modelo actual y considera que no es necesario realizar cambios para mejorar la productividad.
La Mesa de Turismo ya aventuró el pasado 19 de diciembre que la propuesta realizada por el presidente del Ejecutivo, Mariano Rajoy, en aras de "racionalizar el calendario laboral", iba a generar "opiniones encontradas en el sector turístico".
La Alianza para la Excelencia Turística, Exceltur, se mostró más optimista, al defender que "en principio (el traslado de los puentes) parece más positivo que negativo", ya que el 'lobby' turístico ve con buenos ojos "cualquier medida que ayude a mejorar la productividad del país".
CASAS RURALES A FAVOR, AGENCIAS EN CONTRA.
Por su parte, la Confederación Española de Agencias de Viajes y Touroperadores (Ceavyt) se mostró más tajante al respecto, advirtiendo de que la eliminación de los puentes perjudicará "sustancialmente" al sector.
En declaraciones a Europa Press, el presidente de la patronal, Rafael Gallego, precisó que la reforma del calendario laboral puede ser "beneficiosa" para el turismo si la festividad en cuestión cae en miércoles y el día festivo se traslada a un lunes o un viernes, aunque rechaza de plano que, en el caso de que el día de fiesta sea un martes o un jueves, se cambie por un lunes o un viernes.
En cambio, Toprural, web de turismo rural que aglutina el 60% de la oferta de establecimientos de este tipo, defiende que "las reservas de casas rurales aumentan cuando el día festivo cae en lunes o viernes".
A modo de ejemplo, el portal especializado explicó que en el caso del Día de Todos los Santos de 2010, que cayó en lunes, la ocupación alcanzó el 75%, mientras que este año, que la festividad ha caído en martes, las reservas no han superado el 56%.
