BRUSELAS, 20 May. (EUROPA PRESS) -
La aerolínea belga Brussels Airlines retomará las operaciones aéreas el próximo 15 de junio con una reducción del 25 por ciento de sus rutas, en un reajuste de su oferta que, según la compañía, se irá adaptando a las demandas del mercado y las condiciones que impongan las autoridades nacionales por el coronavirus.
Aunque una portavoz de la aerolínea ha indicado que todavía no hay una decisión oficial sobre cómo quedarán las rutas, medios belgas ya apuntan que las conexiones con España se verán afectadas y se suprimirán los vuelos a Sevilla y Valencia. Actualmente la compañía conecta Bruselas con 12 destinos españoles, entre ellos Madrid, Barcelona y Palma de Mallorca.
Brussels Airlines asegura que, pese al recorte de un cuarta parte de sus conexiones, mantendrá su oferta de destinos turísticos españoles. En la compañía confían en que la red de conexiones se pueda ir expandiendo gradualmente según se recupere la demanda de billetes y lo permitan las condiciones de vuelo de las autoridades de los distintos países en los que opera.
Para retomar la actividad, ha puesto en marcha medidas de protección para el personal de vuelo y para los clientes, entre las que se encuentra un especial hincapié en la desinfección de los aviones y el uso de mascarillas en los vuelos.
PILOTOS OFRECEN REBAJARSE UN 45% SU SUELDO
Ante la situación de dificultad que vive el sector y el plan de la dirección de proceder a una reestructuración de plantilla con la que prescindirá de 1.000 puestos de trabajo, los pilotos de Brussels Airlines han propuesto este miércoles rebajarse un 45 por ciento el sueldo y las horas de trabajo para evitar los despidos.
Según el colectivo, esta reducción "significativa" permitirá ahorrar 100 millones de euros hasta 2023 y la presentan como una alternativa al plan de reestructuración de la empresa. "La propuesta se basa en tres condiciones. La primera; que todo el mundo se quede a bordo, la segunda; que la rebaja dure solo hasta 2023, la tercera; que la dirección retire su plan", ha señalado el secretario permanente del sindicato CNE, Didier Lebbe, en declaraciones a la cadena pública RTL.
El plan que prevé la compañía incluye 1.000 despidos, entre ellos 191 pilotos y 470 miembros de tripulación, la supresión de una veintena de rutas poco rentables y un recorte del 30% en su flota para recuperar la viabilidad de la compañía, propiedad de Lufthansa.
Las medidas de confinamiento en la mayoría de los países de la UE para tratar de contener la pandemia ha dejado a las aerolíneas en tierra durante un periodo que dura ya dos meses, una situación que ha agravado las serias dificultades que atravesaba ya la aerolínea de bandera belga.
