BRUSELAS, 20 Abr. (EUROPA PRESS) -
La falta de controladores aéreos en el aeropuerto de Charleroi ha obligado a anular, reprogramar y desviar varios vuelos este miércoles, incluido uno procedente de Madrid, después de que el aeropuerto haya tenido que permanecer cerrado entre las 7.15 a 11.30 horas por falta de personal, según ha informado la propia terminal.
Ningún vuelo ha podido desplegar ni aterrizar en Charleroi entre las 7.15 y las 11.30 por falta de controlares aéreos en Belgocontrol.
"Todos los vuelos basados en Charleroi han salido no obstante entre las 6.30 y las 7.15 horas. Los vuelos han sido modificados o reprogramados para responder a la situación" y permitir las salidas, ha explicado el portavoz de Charleroi, Vincent Grassa.
Con todo, tres vuelos con destino a Atenas, Praga y Bucarest entre las 9.10 y las 10.45 horas han tenido que ser anulados, según ha informado la cadena púbica RTBF.
En el caso de las llegadas previstas, se han registrado retrasos y varios vuelos han tenido que ser desviados, entre ellos un vuelo de Ryanair procedente de Madrid. Los vuelos, la mayoría de Ryanair, han sido desviados princialmente a la ciudad francesa de Lille, en la frontera.
Cuatro vuelos procedentes de Madrid, Manchester, Copenhague y Cluj-Napoca (Rumanía) han tenido que ser desviados debido a la falta de controladores aéreos de Belgocontrol, según la terminal belga, que ha precisado que no ha sido una huelga.
La portavoz de Belgocontrol, Dominique Dehaene, ha admitido que varios controladores "están enfermos" y la dificultad de cubrir sustituciones a tiempo. "Este miércoles, se trata de un caso excepcional", ha incidido no obstante en declaraciones recogidas por los medios locales.
RETRASOS EN VUELOS.
La falta de controladores aéreos también ha provocado "retrasos" en las operaciones en el aeropuerto de Lieja, entre las 8.00 y las 10.00, las 12.00 y las 12.45 y las 19.00 y 22.00 horas, según ha confirmado un portavoz de Eurocontrol a Europa Press, que ha confirmado que se han acumulado 3.000 minutos en retrasos a lo largo de la jornada debido a la falta de controladores aéreos en Bélgica, pero también en Alemania y Chipre.
El tráfico aéreo de Bruselas intenta volver a la normalidad desde los atentados del 22 de marzo, que causaron graves daños materiales en el aeropuerto de Zaventem. Desde entonces, los controladores han llevado a cabo varias acciones de protesta por motivos laborales.