El naufragio del 'Concordia' mostró la fortaleza de la marca, según Costa

Naufragio Costa Concordia
EU HUMANITARIAN AID AND CIVIL PROTECTION/FLICKR
Actualizado: domingo, 9 diciembre 2012 14:30

Los trabajos de reflote del buque durarán un año y costarán al menos 300 millones

MADRID, 9 EUROPA PRESS)

Costa Cruceros considera que el naufragio del buque 'Concordia', que se estrelló en enero con 4.200 pasajeros a bordo en las costas italianas, ha puesto de relieve la fortaleza de la marca de la naviera, que tras ver cómo sus ventas cayeron un 60% en las dos primeras semanas, dos meses después comenzaron a recuperarse.

"Tras el accidente y en las semanas siguientes la imagen de Costa se vio perjudicada, con un impacto de casi el 60% sobre nuestras ventas y sobre las ventas de todo el sector en su conjunto", reconoce el director general de Costa en España y Portugal, Bernardo Echevarría.

No obstante, el directivo resaltó que pese a la tragedia, que "no debería haber ocurrido nunca", Costa siguió teniendo el apoyo del distribuidor y del consumidor y logró recuperar sus ventas.

A los dos meses del naufragio, las ventas de la crucerista se recuperaban por encima incluso de las de sus competidores. "Pese a tener precios asequibles, teníamos que tener una imagen fuerte para seguir generando la demanda", explicó.

"Se dieron cuenta de que se trató de un accidente puntual y no algo generalizado y de que el crucero sigue siendo una de las experiencias vacacionales más seguras que existen", señaló Echevarría.

Como ejemplo, destacó que las encuestas realizadas después del accidente del 'Concordia', elaboradas por Ipsos, constatan que Costa sigue manteniendo el reconocimiento de la marca.

"Se puso de relieve la fortaleza de la marca, la imagen fue impactada durante las primeras semanas, pero la marca no tanto, tal y como demostró la evolución de las ventas. A pesar de la crisis seguimos siendo líder en el mercado y en ventas", aseguró.

ESCLARECER LA VERDAD.

Durante la vista previa del caso 'Concordia', que tuvo lugar en octubre y en la que la naviera se ha personado como parte perjudicada, Costa defendió que no fue informada de la variación de la ruta de la nave hacia la isla de Giglio (Italia), una notificación que recae sobre el capitán del barco, Francesco Schettino.

"El capitán es el responsable de mantener la ruta trazada. No existe un procedimiento que diga que el comandante pueda acercarse a saludar a alguien desde un barco, pero sí existe la navegación turística, aproximarse para apreciar mejor la navegación pero siempre en los límites de seguridad estipulados y sin comprometer la seguridad de los pasajeros", explicó.

Costa mantiene que la unidad de crisis que fue activada durante el accidente no tuvo toda la información relevante y pertinente por parte del capitán para poder gestionar o actuar de una y otra forma. Las inspecciones realizadas a toda la flota, más de 110 en 2011, fueron todas satisfactorias, y el barco 'Concordia' cumplía con todos los requisitos y normativas estipuladas.

De los 970 miembros de tripulación del barco, 890 tenían el certificado de Formación Básica de Seguridad (BST, por sus siglas en inglés) que les hace partícipes de las tareas de evacuación.

Costa confía en que el juicio sirva para esclarecer la verdad al 100%. "Queremos entender lo que ha pasado, pero sabemos lo que hemos hecho y somos transparentes y claros. El interés de la compañía es mantener su reputación labrada en 60 años incluso como compañía pionera en seguridad", zanjó.

REFLOTE DEL 'CONCORDIA'.

En esta línea, recordó que Costa va a tratar de solucionar parte de las consecuencias del naufragio en el entorno marino con la mayor operación de remozamiento de un barco y la más compleja y costosa.

"Ser una compañía innovadora está en nuestro ADN y en nuestros valores", subrayó, para añadir que la operación demostrará que Costa es una empresa "pionera y comprometida".

El 'Concordia' se volverá a poner a flote, se estabilizará y se remolcará al puerto de Grosetto, para luego ser desguazado y repoblar la flora afectada del fondo marino.

La operación, que empezó en octubre y se prolongará durante un año, tendrá un coste de al menos 300 millones de euros. Los trabajos, realizados por una 'joint-venture' americana-italiana, podrán seguirse en la web de Costa en directo paso a paso.