La presidenta de GSK, Cristina Henríquez de Luna, ha indicado que "la comunidad científica mundial está trabajando para sacarnos de esta situación de fragilidad en la que nos encontramos. El desarrollo de una vacuna es un proceso complejo y costoso. Normalmente hablamos de incluso más de 10 años con costes de alrededor de los 2.000 millones de dólares y en muchos casos no llegan a buen puerto", ha aseverado. (Fuente: Fundación SERES)
