LOS ANGELES, 13 Ago. (EUROPA PRESS) -
Parece que las excentricidades, los vestidos carnosos, los disfraces y las pelucas de colorines podrían pasar a mejor vida y no es porque ella no siga queriendo ser la diva del momento sino porque también es capaz de sorprender a su público cual señorita glamourosa de buen barrio.
Dónde habrán quedado sus atuendos imposibles repletos de carne cruda, de plásticos, de telas... Ahora Lady Gaga es otra mujer, lo ha demostrado aliándose al color negro y a una melena rubia platino bien larga.
El estiloso vestido, firmado por Versace, sacó su lado más sofisticado gracias a su corte asimétrico con un solo tirante, por la rodilla y con una raja muy sexy. Todo el diseño negro iba decorado con una gran flor amarilla y morada, además de unos bonitos botones dorados que hacían juego con sus pendientes.
En los pies, Gaga dejó sus imposibles andamios en casa para subirse en unos 'suela roja', tal y como hemos podido apreciar en las fotos publicadas por 'Daily Mail', donde además se puede ver su cluth oscuro, su maxi pulsera dorada que también dibujaba una flor y sus particulares gafas negras.
Sin duda el atuendo deja boquiabiertos a todos, que se potencia, aún más, gracias a su larguísima melena rubia platino, con raya a un lado y algo de flequillo y sus uñas rojas a modo de galápago.
Ahora entendemos por qué su abuela, que ha hablado para la revista 'Life & Stile', no se asusta de su nieta. "Acostumbrada", además de "un poco ciega", ha confesado estar Angelin Germanotta, de 80 años.
"Sólo puedo ver sus piernas cuando está en televisión, así que está bien que ella use esas prendas, así la puedo detectar", explicó, a la par que añadía que Gaga fue "muy buena estudiante e iba a misa de pequeña", una faceta que le hace ser "una chica normal", según su abuela.
