Intervienen más de 100 kilos de cocaína llegada al puerto en un contenedor de maíz blanco

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Actualizado: sábado, 3 enero 2009 18:10


MADRID/VALENCIA, 3 Ene. (EUROPA PRESS) -

Agentes de la Guardia Civil, destinados en el aeropuerto de Madrid-Barajas, han intensificado los servicios preventivos de lucha contra el narcotráfico con motivo de las fiestas navideñas interviniendo, a lo largo de diciembre, algo más de 350 kilos de sustancias estupefacientes en más de 40 servicios diferentes, según informó hoy el Instituto Armado. El servicio de mayor importancia, por la gran cantidad de droga intervenida, fue la intervención de más de 100 kilos de cocaína que fue introducida en el puerto de Valencia en un contenedor de maíz blanco procedente de Perú.

Los agentes destinados en Barajas colaboraron durante el operativo con otras unidades de la Guardia Civil de diferentes provincias, lo que permitió poner a disposición judicial a 50 personas de diferentes nacionalidades como presuntos autores de delitos contra la salud pública.

En concreto, la operación realizada en Valencia se llevó a cabo en colaboración con la Policía Nacional Peruana (DIRANDRO), de la que se recibió información que hizo sospechar que en uno de los contenedores de un barco que había zarpado unos días antes desde el puerto peruano de El Callao, se ocultaba cierta cantidad de droga.

Agentes de la Benemérita comenzaron el seguimiento del barco, que unos días después recaló en el puerto colombiano de Cartagena con rumbo a Valencia. El contenedor en el que supuestamente había sido introducida la droga transportaba maíz blanco con destino a una conocida empresa valenciana de frutos secos.

La droga se introdujo en bolsas de deporte y mochilas, tras romper los precintos del contenedor, que fueron sustituidos por otros falsificados, similares a los originales. En esas bolsas también se incluía otro juego de precintos falsos, para que los encargados de sacar la droga del contenedor pudieran reponerlos sin que nadie notase que había sido abierto.

Varios agentes se desplazaron hasta la ciudad levantina, donde esperaron varios días a que alguien recogiese la carga, y ante el abandono de esta, abrieron el contenedor para comprobar la veracidad de los indicios que les habían llevado hasta Valencia.

Los precintos del contenedor habían sido manipulados, según el 'modus operandi' que los agentes se esperaban, y en el interior se encontraron cuatro bolsas de deporte, que contenían cada una 25 paquetes de cocaína con una cantidad de droga ligeramente superior a los 100 kilogramos.

Agentes de la Compañía de Seguridad detectaron el pasado 20 de diciembre un equipaje con destino Málaga en cuyo interior se apreciaba un gran número de paquetes tipo "ladrillo". Tras localizar el equipaje físicamente, así como a su propietario, se realizó una primera inspección con perros detectores de explosivos y detectores de sustancias estupefacientes, dando este último positivo. Así, los agentes comprobaron que en su interior se transportaban 16 kilogramos de una sustancia en polvo de color marrón que dio positivo a la prueba de heroína.

Ante estos hechos se procedió a la detención de T.K., búlgaro de 35 años de edad como presunto autor de un delito contra la salud pública.

La presión sobre los delincuentes se mantuvo durante todos los días de fiesta navideños, interviniendo los dos últimos días del mes, más de 20 kilogramos de cocaína ocultos en dobles fondos de equipajes, en tres servicios diferentes, correspondientes a vuelos procedentes de Ecuador, República Dominicana y Brasil, deteniendo en todos los casos a los portadores de los mismos.

En otro orden de cosas, también entre los servicios más destacados, a primeros de mes, agentes de Policía Judicial recibieron información de la Agencia Antidroga de Estados Unidos (DEA) de un posible envío de cocaína desde Colombia por vía aérea.

Tras el análisis de paquetería y documentación se detectó que en una lavadora procedente de Colombia, con escalas en Miami y Madrid, y destino final Barcelona, se escondían varios de kilos de sustancias que perfectamente podían ser cocaína.

Tras la custodia del envío por carretera entre Madrid y Barcelona por agentes de Barajas, la Guardia Civil de Barcelona comprobó que en el interior del electrodoméstico se ocultaban 36 kilogramos de cocaína de gran pureza, lo que permitió la detención de un varón por estos hechos.

A mediados de mes, dos actuaciones más permitieron localizar alrededor de 30 kilogramos de cocaína cuyo destino era el tráfico de la misma en la capital española durante el periodo navideño.

El pasado día 18, al aterrizar un vuelo procedente de San José (Costa Rica), agentes de la Compañía Fiscal de Barajas procedieron a la detención de dos ciudadanos israelíes tras hallar en el equipaje facturado que portaban numerosos "ladrillos" de cocaína cuyo peso era superior a los 12,5 kilogramos.

Cuatro días más tarde, agentes de la misma unidad, a la llegada de un vuelo procedente de Lima, detectaban 16,3 kilogramos de la misma sustancia oculta en botes de cerveza, en varios armazones e impregnada en numerosas prendas de vestir, por lo que se procedió a la detención de R.G.S. ciudadano español como presunto autor de un delito contra la salud pública.