Actualizado: viernes, 7 octubre 2011 19:21

MADRID, 7 Oct. (EUROPA PRESS) -

El ex directivo de la SGAE Pedro Farré, detenido este viernes por la Guardia Civil en el marco de la 'operación Saga', dijo a miembros de la Unidad Central Operativa (UCO) que el ex presidente de la Sociedad Digital de Autores y Editores (SDAE), José Luis Rodríguez Neri "no era trigo limpio".

En el transcurso de la declaración que prestó como testigo el pasado mes de julio, poco después de la detención del propio Neri y del ex presidente de la SGAE Teddy Bautista, especificó que el considerado principal cabecilla de la trama era una persona "muy beligerante" y "muy de camarillas".

Farré fue detenido este viernes por agentes de la UCO de la Guardia Civil y ha quedado en libertad a la espera de la decisión del magistrado instructor de la causa, el juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz, que le ha citado el lunes como imputado por la comisión de un delito de apropiación indebida.

El ex directivo de la SGAE ocupó entre los años 2002 y 2009, los cargos de director de la Oficina Antipiratería de la SGAE, director de relaciones institucionales y consejero en la mercantil Portal Latino SL, vinculada a la trama.

Además, también mantuvo relaciones laborales con otra de las empresas relacionadas con Neri, Microgénesis, principal proveedora de servicios de la SDAE. Según reconoció en la declaración prestada ante la UCO el 21 de julio y reflejada en el sumario del caso, al que ha tenido acceso Europa Press, percibió de Microgénesis 4.000 euros mensuales durante cinco meses, como asesor de la empresa en Estados Unidos.

El contenido de este testimonio desvela también la opinión del nuevo implicado en la trama sobre el ex presidente de la SGAE, Eduardo Bautista. Farré dijo a los agentes que le interrogaron que 'Teddy' es una persona "muy exigente" con la que resulta "muy duro" trabajar debido a su dedicación absoluta a la sociedad.

12 DIRIGENTES IMPUTADOS

Los dos principales imputados en el procedimiento son el ex director de la SDAE y presunto cabecilla de la trama, José Luis Rodríguez Neri, y el directivo de Microgénesis Rafael Ramos, que recuperaron la libertad tras depositar sendas fianzas de 300.000 y 150.000 euros, respectivamente. El juez les atribuye los delitos de apropiación indebida y administración fraudulenta, a los que se suman un delito societario en el caso de Neri y otro de alzamiento de bienes en el de Ramos.

El procedimiento también se sigue contra Eduardo 'Teddy' Bautista, expresidente de la SGAE; Enrique Loras, exdirector general; Ricardo Azcoaga, exdirector financiero; Elena Vázquez, principal accionista de Microgénesis; y Celedonio Martín, director financiero de esta empresa.

También están imputadas tres familiares de Ramos --su esposa, María Antonia García Pombo; su cuñada, Pilar Eva García Pombo; y su hija, Sara Ramos Vázquez-- y otros dos de Rodríguez Neri --su hermana, Juana Cristina Rodríguez Neri; y su hija, Leticia Rodríguez Álvarez--.

Según la investigación de Ruz, Bautista "autorizó, consintió e impulsó" la trama defraudatoria desarticulada en la conocida como 'operación Saga', que había sido ideada por Rodríguez Neri. En el fruto de esta actividad presuntamente fraudulenta, la SGAE invirtió "importantes sumas de dinero sin obtener a cambio la esperada rentabilidad para sus socios" a través de una red de empresas vinculadas a la sociedad digital, entre ellas la mercantil Microgénesis, que controlaba el propio Rodríguez Neri.