El PP dice que la orden afectó a muchas comisarías y que se trata de una medida "inadmisible, ilegal y xenófoba"
MADRID, 4 Mar. (EUROPA PRESS) -
El secretario de Estado de Seguridad, Antonio Camacho, aseguró hoy que los cupos para detener a un número determinado de inmigrantes en situación irregular funcionaron "en no más de 4 ó 5 comisarías" de policía en Madrid, hecho que achacó a "un error operativo" que fue solucionado "inmediatamente".
Durante su comparecencia en la Comisión de Interior del Congreso, Camacho aseguró que estos cupos no fueron puestos en marcha a raíz de una "instrucción política" y añadió que se trató de "una actuación limitada a muy pocas comisarías".
"En el ámbito de la delincuencia sí suelen establecerse criterios de intensidad de la actuación policial en relación a los problemas que afectan a cada uno de los barrios, pero en esta caso, por error, se fue más allá en el ámbito de la inmigración", señaló.
En cualquier caso, el secretario de Estado destacó que "en el momento en el que se tuvo conocimiento de que se habían establecido estos cupos se dio una instrucción automática de que desaparecieran". "Compartimos que el establecimiento de los cupos no fue adecuado, pero se ha dado una solución", agregó Camacho, quien dijo que "no es cierto que afectaran a unas nacionalidades por encima de otras".
Una instrucción interna de la Jefatura Superior de Policía de Madrid, que adelantó Europa Press el pasado 15 de febrero, ordenaba el establecimiento de cupos en la Comisaría de Villa de Vallecas, pero también indicaba que los policías deberían dar prioridad a los marroquíes para solicitar su ingreso en el CIE porque estos nacionales son más baratos de repatriar, al hacerse por carretera.
Además, el secretario de Estado acusó al PP de estar "intentando elevar a categoría de norma lo constituye una actuación limitada a muy pocas comisarías" y añadió que este tema "ya no da para más" y que los 'populares' tratan de "mantener una polémica que no existe". "Está intentando sacar conclusiones en el ámbito de la política de inmigración de este Gobierno y se está equivocando", aseveró.
Por su parte, el portavoz 'popular' de Interior en el Congreso, Ignacio Cosidó, exigió al Gobierno que aclare quien dio esa orden de detener a un número determinado de extranjeros. "Yo sé que usted no ha dado esa orden, pero le exijo que diga quien la dio", dijo Cosidó al secretario de Estado.
Asimismo, recalcó que la "orden, que es inadmisible, ilegal y xenófoba, se dio a un número importante de comisarías" y no sólo a unas pocas y agregó que este "incidente de extrema gravedad" no ayuda a mantener "unas buenas relaciones con Marruecos".
INCIDENTES EN LA VALLA DE MELILLA
En cuanto a los incidentes de la valla de Melilla, motivo de la solicitud del PP para que compareciera Camacho, el secretario de Estado aseguró que son hechos "aislados y puntuales" propios de una "frontera complejísima que divide a dos mundos muy diferentes". Así, apuntó que desde julio se han producido cinco incidentes destacados aunque negó que "se puede hablar de una situación de deterioro grave en la frontera".
Sobre el cierre de la frontera entre Marruecos y Melilla el pasado mes de julio, a causa de los incidentes provocados por la detención del senador marroquí Yahya Yahya, Camacho defendió la actuaciones "policiales y diplomáticas" que el Gobierno llevó a cabo para resolver esta situación y agregó que se abrió la frontera cuando estuvo "garantizada la seguridad".
Asimismo, dijo que tras el incidente del 1 de enero, en el que falleció un subsahariano que participaba en una avalancha a causa de un disparo de la policía marroquí, se reforzó el personal y los medios de seguridad y se realizaron reparaciones de emergencia en la valla, que había sido dañada por las inundaciones.
Camacho defendió que la estrategia que el Gobierno socialista ha sido "eficaz" porque la presión migratoria en Ceuta y Melilla ha descendido un 78 por ciento desde 2005 y aseguró que, aunque en un futuro se aumentarán, "en este momento los efectivos son suficientes para llevar a cabo la importante labor que prestan" en las fronteras.
En este sentido, afirmó que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado "desarrollan su trabajo con una alta eficacia y siempre dentro del Estado de Derecho", por lo que rechazó las acusaciones "sin ningún fundamento" de prácticas vejatorias. "La frontera de Melilla es un escenario muy difícil de gestionar pero es una prioridad del Ministerio del Interior garantizar la seguridad y evitar que sea traspasada ilegalmente", concluyó.
EL PP DENUNCIA LA "PASIVIDAD DEL GOBIERNO"
Mientras, Cosidó denunció "un deterioro grave de la situación de la frontera de Melilla ante la pasividad del Gobierno" y agregó que los incidentes no son "puntuales sino semanales", lo que provoca una situación de "caos habitual" en la frontera.
El diputado del principal partido de la oposición también criticó que en los últimos seis meses un total de 18 policías han sido agredidos y aseguró que entre los funcionarios policiales existe "una sensación de desamparo del Gobierno".
Por ello, pidió al Ejecutivo que ponga "más medios y más efectivos en vez de tratar de ocultar los incidentes" y que mejore la coordinación entre policía y la Guardia Civil en la frontera, entre el Gobierno central y el Ejecutivo de Melilla, y entre España y Marruecos. Por su parte, la diputada de UPyD, Rosa Díez, demandó un mayor esfuerzo "para proteger a los que nos protegen".
