Euskadi es la comunidad donde más se ha reducido el consumo de tabaco, un 10% en cinco años

Estanco de tabaco
EUROPA PRESS
Actualizado: jueves, 5 mayo 2011 19:57

BILBAO, 5 May. (EUROPA PRESS) -

Euskadi es la comunidad autónoma donde más se ha reducido el consumo de tabaco, ya que, en cinco años, la prevalencia de tabaquismo en el País Vasco se redujo en un 10 por ciento, unos 5 puntos por encima de la media nacional, donde el número de fumadores supera el 30 por ciento de la población.

No obstante, en Euskadi todavía hay 900.000 fumadores, entre los que fuman a diario y los esporádicos, lo que supone un 25 por ciento de la población, según datos aportados en las X Jornadas SEDET y IV Jornadas de la Sociedad Vasco Navarra de Prevención del Tabaquismo (SVNPTab).

En concreto, más de 200 especialistas en tabaquismo se reúnen desde este jueves en Bilbao para participar en las IV Jornadas de la Sociedad Vasco Navarra de Prevención del Tabaquismo (SVNPTab) y X Jornadas de la Sociedad Española de Especialistas en Tabaquismo(SEDET), que se celebran en el Paraninfo de la UPV/EHU Bizkaia Aretoa entre el 5 y el 7 de mayo. El tema de las jornadas es 'Tabaco y Desigualdad'.

En Euskadi se redujo un 10 por ciento el consumo de tabaco y sobre esta media se situaron también Madrid (8%), Castilla y León (7%), Cataluña y Extremadura (ambas un 6%). Por el contrario, donde menos se redujo el consumo fue en Cantabria, menos del 2 por ciento, seguido de Asturias y la Comunidad Valenciana, sobre el 2 por ciento.

Según se ha señalado en estas jornadas, la falta de recursos provoca que muchos fumadores no puedan acceder a los tratamientos, por lo que la prevalencia de tabaquismo es "mayor" entre las clases sociales más desfavorecidas.

En este sentido, los expertos piden a Osakidetza que financie el tratamiento farmacológico "que ha resultado ser eficaz y eficiente", que es el de mejor coste-efectividad de toda la Sanidad y que multiplica por tres el éxito del abandono del tabaco.

El coste del tratamiento con medicamentos sería de 300 euros por paciente, mientras que cualquier actividad ocasionada por un paciente a causa del tabaco podría costar al menos unos 6.000 euros.