Seis jóvenes se desnudan frente al Ayuntamiento de Palma en rechazo a la "tortura" que suponen las corridas de toros

Actualizado: jueves, 24 julio 2008 15:38

Grosske se compromete a solicitar a Calvo que declare Palma ciudad antitaurina, tal como ya se ha hecho en Barcelona o Lleida

PALMA DE MALLORCA, 24 Jul. (EUROPA PRESS) -

Seis jóvenes (cuatro chicas y dos chicos) pertenecientes a la organización AnimaNaturalis se desnudaron hoy frente al Ayuntamiento de Palma, donde tumbados en el suelo simularon tener clavadas dos banderillas en la espalda, con el fin de concienciar a la ciudadanía sobre la "tortura" que suponen las corridas de toros, en las que anualmente, "mueren más de 500.000 animales en España".

En declaraciones a Europa Press, la coordinadora de la campaña internacional antitaurina de AnimaNaturalis, Aída Gascón, subrayó que el objetivo de esta acción, que coincide con la corrida que se celebrará esta tarde en la Plaza de Toros de Palma, pretende hacer sentir a los ciudadanos el "sufrimiento" que padecen los toros.

Así, explicó que los seis activistas, con pintura roja en la espalda simulando la sangre, representaban a los seis toros que morirán esta tarde en la capital balear, con el objetivo de que la población "se ponga un poco en la piel del toro". Tras el acto, entregaron una carta en el Ayuntamiento para que la alcaldesa, Aina Calvo, declare la capital balear como ciudad antitaurina, tal como han hecho otros municipios, como Barcelona o Lleida.

Gascón criticó que cada ciudadano de España destina anualmente 43 euros para las corridas de toros, debido a que, según recordó, el Ministerio de Cultura presupuesta cada año un total de 500 millones de euros para subvencionar estos espectáculos y fiestas en las que participan todo tipo de animales.

Ante esta situación, anunció que durante esta tarde, activistas de AnimaNaturalis repartirán folletos informativos a los turistas que acudan a la Plaza de Toros de Palma, con la pretensión de que conozcan "realmente" qué es una corrida de toros, dado que "muchos acuden engañados, después de que las agencias turísticas les digan que se trata de un baile español".

En este sentido, el folleto, escrito en castellano, inglés, ruso y japonés, explica que una corrida de toros es un "espectáculo cruel y sangriento, donde el torero tortura al toro hasta la muerte en la arena de la plaza" y detalla que al animal "le cortan las puntas de los cuernos, le clavan una lanza de 45 centímetros de largo en la base del cuello, así como banderillas de 8 centímetros que desgarran sus nervios y músculos y una espada de entre 80 a 100 centímetros, que le perfora el corazón, los pulmones, el diafragma o el hígado".

Por otra parte, Gascón recalcó que su organización "no busca la confrontación con los taurinos", quienes, a su juicio, tienen una mentalidad "muy cerrada" e insistió en que muchos turistas que acuden a la corridas "no saben que el toro sufre y que se le mata y, por ello, dijo que muchos de ellos salen llorando y enfadados de las plazas tras la muerte del primer toro".

GROSSKE PIDE LA PROHIBICIÓN DE LAS CORRIDAS

A la acción organizada por AnimaNaturalis, acudió el regidor de Bienestar Social y Participación Ciudadana, Eberhard Grosske, quien se comprometió en declaraciones a Europa Press a suscitar el debate en el equipo de Gobierno Municipal para que Calvo declare Palma ciudad antitaurina

No obstante, consideró que más allá de la declaración formal, se debe instar a los órganos competentes del Estado para que "se prohíban las corridas de toros", ya que, según criticó, "vulneran de manera flagrante el espíritu de todas las leyes estatales y autonómicas de protección de los animales".

Así, aseguró que estas normativas cuentan con una cláusula "trampa", que permite que por "arraigo tradicional de las fiestas" se puedan llevar a cabo festejos que supongan "tortura de animales", lo que calificó de "sorprendente y absurdo". Finalmente, recordó que en la pasada legislatura, cuando ejercía como portavoz de EU-Els Verds en el Ayuntamiento de Palma, presentó una moción para que se declarara la capital balear ciudad antitaurina.