El COAM pide un concurso de ideas para restaurar el frontón Beti-Jai y que Gallardón lo incluya en su proyecto olímpico

Actualizado: jueves, 15 enero 2009 14:45

MADRID, 15 Ene. (EUROPA PRESS) -

El Colegio de Arquitectos de Madrid (COAM) ha solicitado hoy la convocatoria de un concurso de ideas que contemplen todas las posibilidad de reutilización del frontón Beti-Jai, así como su inclusión en el proyecto olímpico de Madrid'16, con el objetivo de evitar su ruina.

El COAM se suma a la iniciativa de la recién constituida plataforma 'Salvemos el Beti-Jai' para que el frontón sea olímpico y frenar así "el lamentable y peligroso estado de conservación" del frontón, "último ejemplo de esta tipología que arquitectónica y quizá su mejor representante de los diecinueve que hubo en Madrid".

El COAM, "en cumplimiento de su compromiso estatutario en la defensa del patrimonio arquitectónico y coherente con el criterio mantenido desde hace años del mantenimiento y rehabilitación de este edificio", ha ofrecido su colaboración a las Administraciones competentes, Comunidad y Ayuntamiento, para buscar una solución definitiva, "que debería pasar por la convocatoria de un concurso de ideas que contemplase todas las posibilidades de reutilización".

El Colegio de Arquitectos apela al interés arquitectónico que despierta este testigo del neomudéjar como estilo castizo de la capital, respaldado por el interés ciudadano.

La organización colegial pide al alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón que el próximo Día del Deporte, el 15 de junio, Día del Deporte, de la noticia de que ha encontrada una solución al "deterioro" de este inmueble, declarado Bien de Interés Cultural.

El COAM pide la urgente intervención del Ayuntamiento y la rápida restauración del frontón apelando al artículo 36 de la Ley 16/1985 de 25 de junio de Patrimonio Histórico Español, se establece que los bienes integrantes del Patrimonio Histórico Español deberán ser conservados, mantenidos y custodiados por sus propietarios o, en su caso, por los titulares de los derechos reales o por los poseedores de tales bienes.

La misma Ley precisa que "cuando los propietarios o los titulares de los derechos reales sobre bienes declarados de interés cultural o bienes incluidos en el inventario general no ejecuten las actuaciones exigidas en el cumplimiento de la obligación prevista, la Administración competente, previo requerimiento a los interesados, podrá ordenar su ejecución subsidiaria".

Asimismo, la Ley 10/1998 de 9 julio de Patrimonio Histórico de la Comunidad de Madrid, en cuanto al deber de conservar, dice en su artículo 18 dice que "los propietarios, poseedores y demás titulares de derechos reales sobre integrantes del Patrimonio Histórico de la Comunidad de Madrid están obligados a conservarlos, mantenerlos, custodiarlos y protegerlos debidamente para asegurar su integridad y evitar la pérdida, destrucción y deterioro" y se precisa también que "los poderes públicos garantizarán la protección, conservación y enriquecimiento del Patrimonio Histórico de la Comunidad de Madrid".

El Colegio Oficial de Arquitectos de Madrid recordó que en 1976 tomó la iniciativa de salvar este frontón, fecha en la que la entidad colegial emitió un informe en el que se denunció el "inconcebible trato" al que se le venía sometiendo desde hacía años, reiterando su petición al Ayuntamiento en 2006.

El mencionado informe destacaba que el edificio presentaba unas inmejorables condiciones para su rehabilitación con destino a usos de carácter colectivo, "posibilitado por su rico planteamiento espacial y su céntrico emplazamiento urbano".

EL EDIFICIO 'SIEMPRE FIESTA'

En 1894 la Sociedad Arana, Unibaso y Cía. inauguró en Madrid un edificio destinado a frontón reglamentario de pelota vasca, con un ancho de cancha de 11 metros y una longitud de 67 metros. El proyecto, encargado al arquitecto Joaquín Rucoba, es similar al frontón homónimo de San Sebastián, también obra suya. Se le puso el nombre vasco de 'Beti Jai', 'Siempre Fiesta', en su traducción al castellano.

Los tres pisos del edificio con fachada a Marqués de Riscal estaban destinados a vestíbulo principal y salones de descanso, dependencias administrativas y cajas de escalera independientes para palcos y plateas, sillas y gradas, mientras que en los tres pisos del cuerpo posterior se dispusieron otras dos cajas de escaleras y las áreas de servicio.

Entre ambos pabellones se desarrollaba la cancha descubierta, en el patio, con un graderío de estilo neomudéjar con un aforo de 4.000 espectadores, "en el que destaca el interesante e innovador trabajo en hierro de las galerías y marquesinas, ligera estructura que facilitaba la visibilidad; la fachada exterior, en cambio, sigue el estilo ecléctico de inspiración Segundo Imperio, recurrente en la obra de Rucoba", señaló el Colegio de Arquitectos de Madrid.

Después de haber servido durante años de garaje y almacén, el edificio, que es el frontón más antiguo que se conserva en Madrid y único ejemplar de una tipología arquitectónica de gran interés, fue incoado como Bien de Interés Cultural en 1991 y ha llegado a un estado de "extremo abandono", hallándose pendiente de restauración.

La pelota vasca, deporte de gran complejidad y multiplicidad por las 14 especialidades existentes y los cuatro tipos de instalaciones necesarias, está incluida en el COI como deporte olímpico de demostración, y así fue como pudo ser contemplada en las olimpiadas de 1924, 1960 y 1992, aunque en 1900, en París, fue disputada como deporte de competición.