MADRID, 4 Feb. (EUROPA PRESS) -
El consejero de Economía y Hacienda de la Comunidad de Madrid, Antonio Beteta, ha cuestionado este viernes que el nuevo impuesto sobre el Juego Online mejore la financiación autonómica, puesto a su juicio sólo beneficiará al Estado, ha informado el Gobierno regional en un comunicado.
Beteta se ha pronunciado así respecto al anuncio del Gobierno central de ceder a las comunidades autónomas la recaudación del nuevo impuesto al juego online. El consejero ha criticado que "no explica si lo descontará después del Fondo de Suficiencia, lo que sólo beneficiaría al Estado no a las autonomías".
Así, ha temido que el rendimiento del nuevo impuesto solo beneficie al Estado, en lo que ha considerado "una nueva muestra de deslealtad institucional del Gobierno de Rodríguez Zapatero, que con una mano da a las Comunidades Autónomas la recaudación del nuevo impuesto, pero se lo quite con la otra, mediante descuentos en el Fondo de Suficiencia, de manera que todos los ingresos derivados de la nueva imposición vayan a las arcas estatales".
"Esta instrumentación de las regiones ya tiene precedentes en las recientes subidas del IVA y los Impuestos Especiales, que han sido detraídas automáticamente del fondo de suficiencia global de las Comunidades Autónomas, de manera que las regiones, en la práctica, no se han beneficiado de los incrementos de estos impuestos en los que participan en el 50 por ciento y en el 58 por ciento, respectivamente", ha apuntado.
"Esta es una manifestación más de la política de Zapatero en materia de financiación autonómica y una muestra más de su deslealtad institucional, que tampoco corrige el nuevo sistema de financiación, y que mantiene el agravio a la Comunidad de Madrid, a la que, con el antiguo modelo, y por una falta de aplicación voluntaria del principio de Lealtad Institucional, el Estado generó una deuda de 5.043 millones de euros, que está reclamada ante los tribunales", ha subrayado.
El proyecto de Ley sobre el Juego online, aprobado hoy por el Consejo de Ministros, prevé que la recaudación del nuevo impuesto que gravará las apuestas por Internet vaya a las comunidades autónomas, que tienen cedida la imposición sobre el juego desde hace muchos años, para mejorar los servicios públicos esenciales que prestan a los ciudadanos tales como la sanidad o la educación.
