MADRID, 25 Ago. (EUROPA PRESS) -
La Asociación para la Defensa de la Sanidad Pública de Madrid denunció hoy que los centros de especialidades de las zonas de Torrejón de Ardoz, Collado Villalba y Móstoles pasarán a manos de empresas privadas, "a pesar de que su propiedad no sea de la Comunidad de Madrid sino de la Seguridad Social".
La Asociación recordó hoy en un comunicado que esta decisión se suma a la ya tomada por el Gobierno regional sobre la cesión a empresas privadas de la construcción, gestión, explotación y prestación de la asistencia sanitaria de los 3 nuevos hospitales anunciados para esta legislatura en estas zonas, según adelantó el diario El País este fin de semana.
En ambos casos, según denunciaron, se estaría siguiendo el modelo de concesión administrativa de amplias zonas sanitarias del territorio de la región, como ya sucede con el hospital de Valdemoro cedido a la multinacional Capio. Además, la asociación adelantó que podría pasar lo mismo con los Centros de Atención Primaria que "probablemente entraran próximamente en el paquete de la concesión a la empresa elegida".
"Todo un pastel económico que los gestores de la Comunidad ofrecen a las empresas privadas adjudicatarias que, lógicamente y como ya se ha demostrado, anteponen el beneficio y el lucro económico a las necesidades de salud de la población que tienen que atender", indicó la asociación, al tiempo que subrayó que la prestación asistencial (cartera de servicios y número de camas hospitalarias) a los ciudadanos de las zonas afectadas "va ha estar muy por debajo a la del resto de la Comunidad, según los propios datos de la Consejería de Sanidad".
Así, apuntó que "este expolio de bienes públicos y su traspaso a manos privadas es un atropello más en la línea de los que Esperanza Aguirre ha perpetrado desde que ocupa la Presidencia de la Comunidad de Madrid y cuyas consecuencias han sido el deterioro del Servicio Público de Salud".
En este sentido, indicó que esta situación ha provocado que la región haya pasado de ser el "espejo sanitario" en el que se miraban otras comunidades "a estar a la cola de éstas en cuanto a calidad de servicio, recursos, masificación asistencial, listas de espera y valoración por parte de los ciudadanos".
Por otra parte, criticó que esta decisión de los responsables de la sanidad madrileña resulta contradictoria "con su queja permanente" respecto a la insuficiencia de los fondos sanitarios que la Comunidad recibe del Estado. "Los gasta de manera inadecuada e ineficientemente en beneficio de sus amigos de la empresa privada", apostilló.
A su juicio, la política sanitaria "privatizadora" del Gobierno madrileño "está cambiando el derecho a la salud de los ciudadanos por el negocio". Asimismo, añadió que está conduciendo al desmantelamiento de los servicios públicos de la región, y animó a todos a movilizarse por la defensa de la sanidad pública.
