MADRID, 28 Jun. (EUROPA PRESS) -
La firma automovilística surcoreana Hyundai ha revisado al alza su previsión de ventas en España, a pesar de la caída del conjunto del mercado, según anunció el director general de Hyundai Motor España, Diego Gutiérrez Colomer.
En un encuentro con los medios, Gutiérrez Colomer explicó que mientras las matriculaciones de coches en España cayeron un 6,9% en los cinco primeros meses del año, las ventas de Hyundai aumentaron un 11,6% en el mismo período.
Esta evolución comercial ha permitido a Hyundai elevar su cuota de penetración desde el 3,3% hasta el 3,9%, superando el objetivo establecido para todo 2012 en el 3,8%. Por ello, el director general de Hyundai avanzó que la firma espera cerrar 2012 con una cuota de mercado "por encima del 4%".
Parte de esta evolución positiva de los resultados comerciales se explica por la apuesta de Hyundai por el canal de empresas. De hecho, sus ventas a flotas aumentaron un 71% en los cinco primeros meses de este año.
Estos datos cobran especial relevancia si se tiene en consideración la situación del mercado automovilístico español que, según Gutiérrez Colomer, "podría no llegar este año a las 700.000 unidades" (sin incluir Canarias).
FABRICADOS EN EUROPA
Por otro lado, el directivo destacó que el 80% de las ventas de Hyundai en España corresponden a modelos concebidos y fabricados en Europa, como el ix35 o el i30, mientras que el i10 se fabrica en India y el i20 en Turquía.
De esta forma, las ventas de coches procedentes de Corea suponen aproximadamente el 5%, lo que resta relevancia al tratado de libre comercio suscrito entre la UE y Corea del Sur, y criticado reiteradamente por la patronal de fabricantes europeos de automóviles, Acea.
Tras destacar los buenos resultados de Hyundai Motor Company en el ámbito internacional, que le han llevado a convertirse en el fabricante de coches más rentable, el director general lamentó la situación de los concesionarios en general, con la desaparición de 300 empresas sólo este año, y de la red de Hyundai en particular, con unas pérdidas equivalentes el 0,3% de la facturación en el primer trimestre.
