MADRID, 28 Ene. (EUROPA PRESS) - La Audiencia Nacional ha adelantado al próximo 1 de marzo la salida de la cárcel del exportavoz de Batasuna Arnaldo Otegi al contabilizar las comparecencias en el juzgado que ha realizado en el marco del 'caso Bateragune', por el que fue condenado a diez años de cárcel que el Tribunal Supremo rebajó a seis y medio por intentar reconstruir la formación ilegalizada, informaron fuentes jurídicas. La Sección Cuarta de la Sala de lo Penal, que sigue la jurisprudencia del Tribunal Supremo respecto a las denominadas comparecencias periódicas o 'apud acta', adelanta de esta forma la salida de Otegi de la cárcel de Logroño, que estaba prevista para el próximo 28 de marzo. La decisión se produce después de que el juez central de Vigilancia Penitenciaria, José Luis Castro, aceptara una solicitud de la defensa de Otegi, que alegó que las comparecencias periódicas que tuvo que realizar pueden compensarse como periodos de prisión provisional, y el Servicio Común de Ejecutorias de la Audiencia Nacional realizara el cálculo de los días que correspondía descontar. El 28 de febrero de 2014 el Pleno de la Sala del Tribunal Supremo acordó por mayoría que una medida cautelar de libertad provisional, como la obligación de comparecer periódicamente en un juzgado o comisaría, puede suponer una rebaja de días efectivos de cumplimiento en prisión al haberse producido "intromisión en el ámbito de libertad" del imputado. Es la segunda vez que el tribunal sentenciador adelanta la fecha de licenciamiento del exportavoz de la izquierda 'abertzale', ya que la Sección Cuarta fijó inicialmente su salida de la cárcel para el próximo 8 de abril y la adelantó al 28 de marzo al atender otro recurso de la defensa por idéntico motivo. NO PODRÁ PRESENTARSE HASTA 2021 En enero pasado la Audiencia Nacional también acordó mantener la inhabilitación de Arnaldo Otegi hasta el 28 de febrero de 2021, lo que le impedirá presentarse a las elecciones y acceder a un cargo público. Otegi fue condenado en septiembre de 2011 por la Audiencia Nacional a diez años de cárcel por un delito de integración en organización terrorista al intentar reconstruir Batasuna bajo la dirección de ETA. En mayo del año siguiente el Tribunal Supremo rebajó la pena a seis años y medio de prisión e inhabilitación especial al retirarle la condición de dirigente de la banda.
