IU avisa a Gobierno y bancos que serán "responsables directos" de los suicidios

Cayo Lara, coordinador federal de IU
EUROPA PRESS
Actualizado: lunes, 19 noviembre 2012 17:09


MADRID, 19 Nov. (EUROPA PRESS) -

El coordinador federal de IU, Cayo Lara, ha advertido este lunes tanto al Gobierno como a las entidades financieras de que serán "responsables directos" de los suicidios que se puedan producir a partir de ahora con motivo de órdenes de desahucios.

En su opinión, el Ejecutivo y los bancos han tenido una "responsabilidad inducida" en los suicidios que han tenido lugar hasta el momento debido a los desahucios, si bien ha desatacado que "a partir de ahora tendrán responsabilidad directa, con premeditación y alevosía" debido a que ya conocen el problema y el Gobierno ha elaborado un decreto con el objetivo de solucionar esta situación.

El dirigente de IU ha subrayado en rueda de prensa que la banca ha "chantajeado" al Gobierno de cara a la redacción del decreto aprobado la semana pasada, por lo que se ha preguntado si las deudas de las entidades financieras rescatadas con dinero público son "buenas" mientras las de las hipotecas son "malas".

"Vamos a seguir trabajando para que el poder político esté por encima del poder de la banca española. Ya está bien que sea la banca la que esté marcando los destinos de este país", ha subrayado después de anunciar que la semana pasada el grupo de la Izquierda Plural (IU-ICV-CHA) y el PP mantendrán una reunión en el Congreso de cara a la tramitación parlamentaria.

Así, ha explicado que durante el pasado Pleno de la Cámara Baja la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, se dirigió a él para pedirle conocer las propuestas de la Izquierda Plural sobre el problema de los desahucios, tras lo cual le llamó el portavoz 'popular', Alfonso Alonso, de cara a fijar un encuentro.

De este modo, el dirigente de IU ha indicado que será el martes de la semana que viene, 27 de noviembre, cuando, antes o después de la reunión de la Junta de Portavoces del Congreso, se reunirá con responsables del Grupo Popular. "Le haremos llegar nuestra opinión", ha señalado.

A la pregunta de si cree que el Ejecutivo tendrá en cuenta las sugerencias de la Izquierda Plural de cara a la aprobación del decreto, Lara ha respondido que esto "depende del Gobierno, de los 186 diputados del PP y de lo que sensibilizados que se sientan ante este problema".

LÍNEAS ROJAS

En cualquier caso, ha remarcado que su intención es pedir al PP que en la negociación sobre el asunto se incluya a todos los grupos parlamentarios y también a las asociaciones de afectados por los desahucios, al tiempo que hará hincapié en que sus "líneas rojas" serán los ciudadanos y no la banca.

En este sentido, el coordinador federal de IU ha criticado el decreto elaborado por el Gobierno por considerarlo "un traje a medida de la banca", ya que ha asegurado que cumple las peticiones que hizo la semana pasada Asociación Española de Banca (AEB), que se comprometió a paralizar los desahucios durante los dos próximos años "en aquellos casos en que concurran circunstancias de extrema necesidad".

"Es la banca la que ha fijado una vez más las líneas rojas que el Gobierno no debe traspasar. El decreto generó muchas expectativas, pero no resuelve los problemas de la mayoría de la gente que hace frente a un desahucio", ha denunciado Lara, para quien la moratoria de dos años es "muy restringida" y a "la inmensa mayoría" de las personas que pueden verse afectadas por un desahucio "no le alcanzan las 'bondades' de este decreto".

Además, el dirigente de IU ha lamentado que la medida del Ejecutivo tiene "un claro carácter temporal", ya que no recoge cambios legislativos, tanto en la Ley Hipotecaria como en la de Enjuiciamiento Civil.

Por ello, ha demandado que el decreto sea modificado en el Congreso para que sea retroactivo a la hora de introducir la dación en pago, que una vivienda se pueda transformar en alquiler social a petición del dueño, que se promueva un parque de viviendas de alquiler social con todas aquellas que pasen a formar parte del 'banco malo' y que se modifiquen las citadas leyes y elaborar otra de rango orgánico que garantice el derecho a una vivienda digna.

En cualquier caso, Lara ha dicho estar "convencido" de que los jueces seguirán paralizando desahucios, por lo que espera que, ante esta situación, el Gobierno decida suspender de forma automática todas las órdenes.

Sobre la propuesta del Gobierno de conceder el permiso de residencia en España a extranjeros que adquieran una vivienda cuyo precio sea superior a 160.000 euros, como ha anunciado esta mañana el secretario de Estado de Comercio, Jaime García-Legaz, Lara la considera un "absurdo" porque, a su juicio, "normalmente la gente que pide un crédito así es que quiere establecerse en el país".

"CONVERTIR UN DERECHO EN UN NEGOCIO"

Por otro lado, el coordinador federal de IU ha exigido al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, que ordene a las comunidades autónomas gobernadas por el PP que no apliquen el euro por receta ni cualquier otro tipo de "repago" en la sanidad pública y que, en el caso de Cataluña, interponga un recurso de inconstitucionalidad de acuerdo con el dictamen del Consejo de Estado.

Así pues, Lara ha mostrado su "solidaridad" con las protestas que está protagonizando estos días el personal sanitario porque, a su juicio, las privatizaciones en el ámbito de la sanidad pretenden "convertir un derecho en un negocio".

El dirigente de IU también ha trasladado su apoyo a seis trabajadores de Telefónica que llevan 15 días en huelga de hambre encerrados en el local del comité de empresa de la compañía en Barcelona para exigir la readmisión de uno de ellos, despedido tras un periodo de baja médica y "a pesar de haber ganado dos juicios que consideraban dicho despido nulo e improcedente".

Lara ha explicado que va a pedir al secretario general de CC.OO., Ignacio Fernández Toxo, que "se preocupe por esta situación" para intentar que se resuelva "esta injusticia" que, a su juicio, se ha producido a causa de la reforma laboral, que da la posibilidad a las empresas, y por causas objetivas, de despedir a un trabajador por un absentismo justificado de entre 9 y 20 días en dos meses.