MADRID, 1 Jun. (EUROPA PRESS) -
El diputado de Izquierda Unida en el Congreso, Gaspar Llamazares, ha registrado una batería de preguntas para que el Gobierno le especifique cuál será el "coste real" de la visita que el Papa realizará el próximo mes de agosto a España con motivo de la Jornada Mundial de la Juventud. Entre otras cosas, quiere que el Ejecutivo le aclare si este gasto es compatible con la política de austeridad.
Llamazares tiene especial interés en conocer cuánto va a dejar de ingresar el Estado por las "exenciones e incentivos fiscales" de los que se van a beneficiar las entidades sin ánimo de lucro y de mecenazgo que colaboren con el viaje de Benedicto XVI.
El año pasado, según recuerda, ante una iniciativa similar, el Gobierno se limitó a señalar que esas jornadas serán consideradas un "acontecimiento de excepcional interés público a los efectos de exenciones e incentivos fiscales a las entidades sin fines lucrativos y a las empresas de mecenazgo que colaboran en el evento".
Es decir, admitía que contarán con los máximos beneficios fiscales, pero no detallaba a cuánto ascenderían éstos, ni los impuestos que dejará de ingresar el Estado alegando que el Comité de Apoyo a las Jornadas, órgano competente para certificar la adecuación de los gastos realizados a los objetivos y planes del programa del evento, no había remitido ninguna certificación al respecto.
FALTA DE INFORMACIÓN
Por eso Llamazares ha optado por presentar una nueva batería de preguntas para poder arrojar luz sobre la sistemática falta de datos e información con la que, en su opinión, el Ejecutivo socialista está tratando la colaboración pública que se va a prestar a este evento organizado por la Iglesia católica.
En primer lugar, pregunta al Ejecutivo si la Agencia estatal de la Administración Tributaria tiene ya, a dos meses de la visita del Papa, alguna certificación remitida por el Comité de Apoyo a las Jornadas Mundiales de la Juventud. También demanda que Moncloa le diga si considera los "regalos a entidades privadas que apoyan un evento religioso son compatibles con la política de austeridad derivada de la reducción del déficit público.
Asimismo, solicita que se le especifique si Joseph Ratzinger va a viajar a España como jefe del Estado Vaticano o como "jefe espiritual de la Iglesia Católica, Apostólica y Romana" y si "existe algún acuerdo o convenio específico entre el Gobierno y la Iglesia católica que se refiera a la colaboración en estas jornadas".
CERCA DE 60 MILLONES DE EUROS
Desde el Área de Juventud de IU su coordinadora, Esther López Barceló, ha recordado que desde distintas instancias se ha lanzado la cifra de que el desarrollo de este encuentro religioso en Madrid tendrá un coste cercano a los 60 millones de euros.
De igual forma, Llamazares pregunta si es cierto como han señalado fuentes del Gobierno de Esperanza Aguirre sobre que "la Comunidad de Madrid facilitará el transporte y alojamiento de participantes, tal y como le ha solicitado el Ejecutivo central" y si el Gobierno "aprueba que la Administración ponga gratuitamente a disposición de la Iglesia centros y empleados públicos para la organización de este evento?
"¿Quién se hará cargo de los gastos y posibles incidencias que puedan ocurrir mientras dure la ocupación de las instalaciones?", es otro de los interrogantes que plantea el diputado de Izquierda Unida.
