El tabaco subirá de acuerdo con la política de cada fabricante

Secretario De Estado De Hacienda, Miguel Ferre
EUROPA PRESS
Actualizado: martes, 3 abril 2012 16:29

MADRID, 3 Abr. (EUROPA PRESS) -

El Gobierno sostiene que los cambios que ha introducido en la tributación del impuesto sobre las labores del tabaco permite alinear el sistema español con la tendencia europea y, al mismo tiempo, "blindar" la recaudación del Estado, al protegerla ante las posibles 'guerras de precios' que se puedan desencadenar en el sector.

Así se ha pronunciado el secretario de Estado de Hacienda, Miguel Ferre, durante la rueda de prensa de presentación del proyecto de Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2012, donde ha explicado la modificación introducida.

Ferre ha señalado que en la Unión Europea el peso del tipo 'ad valorem' (porcentual sobre el precio de venta) tiende a la baja, mientras que el peso del específico aumenta.

El objetivo del Gobierno se ha centrado en "corregir la tendencia equivocada que había previamente" en España, donde el componente 'ad valorem' era "de los más altos" de la UE, con una bajada que queda "compensada" con una subida del tipo específico, según aseguró el alto cargo de Hacienda.

"Estamos alineándonos con una tendencia de la Unión Europea y también se blinda la recaudación del Estado en la medida en que la subida del tipo específico nos protege frente a 'guerras de precios' que los operadores pudieran hacer, como ha ocurrido hace no mucho en este país", agregó.

IMPACTO SOBRE LOS PRECIOS.

Preguntado por el impacto del cambio sobre los precios de venta al público, Ferre apuntó que, dado que una parte importante del impuesto es un porcentaje sobre el valor del precio de venta, "la cuantía en la subida de céntimos de cada cajetilla dependerá del precio de venta y de la política de precios que cada operador quiera utilizar".

"No se puede dar una respuesta universal para todas y cada una de las cajetillas, sino que hay que ver cada caso, cómo se compone el precio de venta y cómo se imputa el impuesto a ese precio de esa cajetilla concreta", agregó.

Tras los cambios, el tramo 'ad valorem' baja del 57% al 55%; el tipo específico aumenta desde 12,7 euros a 19 euros por cada 1.000 cigarrillos y el impuesto mínimo se mantiene en 116,9 euros por cada 1.000 unidades.

Según fuentes del sector, se trata de un aumento de la carga fiscal que previsiblemente conllevará un incremento de precios, que puede oscilar entre los 20 y los 25 céntimos por cajetilla. Además, en la industria advierten de que el hecho de que no se actualice el impuesto mínimo "aumenta la brecha" con las marcas más baratas.