MADRID, 1 Ene. (EUROPA PRESS) -
Más de 1,5 millones de madres han recibido los 2.500 euros de prestación o deducción por maternidad o adopción, conocido como Cheque-Bebé, desde que se implantó en julio de 2007, según los datos y estimaciones facilitadas a Europa Press por la Agencia Tributaria sobre esta prestación, que ha sido elimiado desde este 1 de enero de 2011.
Concretamente, en 2007 se beneficiaron 159.537 madres. En 2008, la cifra llegó a 493.949; y en 2009, a 454.400. Aunque la administración no tiene todavía cifras oficiales del presente ejercicio, estima que el volumen de presentaciones será similar al de años anteriores. La cuantía económica destinada por la Agencia Tributaria al Cheque-Bebé ascendería a casi 4.000 millones de euros.
La Ley General de la Seguridad Social establecía una prestación económica no contributiva por nacimiento o adopción de hijos por importe único de 2.500 euros por cada hijo nacido o adoptado en territorio español a partir del día 1 de julio de 2007.
Sin embargo, el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, anunció el pasado mes de mayo una serie de medidas para reducir el déficit, que contemplaba, entre otras, la eliminación de la prestación por nacimiento de 2.500 euros a partir del próximo año.
Por su parte, el Foro Español de la Familia y el Instituto de Política Familiar han denunciado las políticas "antifamiliares" del Gobierno debido a la finalización de la ayuda de 2.500 euros por cada bebé.
"POLÍTICAS ANTIFAMILIARES"
Así, el director del Foro Español de la Familia, Ignacio García, ha señalado, en declaraciones a Europa Press, que esta es "una muestra más de las políticas antifamiliares que se están llevando a cabo". Aún así, ha subrayado que "realmente los 2.500 euros no eran una gran ayuda" y ha apuntado que, además "era una medida no equitativa".
A pesar de ello, ha criticado que cuando se ha comenzado a regular el gasto público se ha empezado por las familias, lo cual "es muy injusto porque las familias son las que están sosteniendo el gasto de la crisis". Asimismo, ha destacado que, además de quitar esta ayuda, "en los presupuestos generales del 2011 no hay ni una sola partida en apoyo a la familia".
Por su parte, el director del Instituto de Política Familiar, Eduardo Hertfelder, ha calificado el fin del cheque bebé como "un paso atrás absolutamente regresivo". Además, ha recordado que "era prácticamente la única medida que había en España" de apoyo a la familia y que la quitan en momentos en el que este es el colectivo "más perjudicado".
En esa línea, ha resaltado que eliminar los 2.500 euros es una muestra más de que "la familia es la gran abandonada y fustigada por este Gobierno". Por ello, ha indicado que desde el Instituto, instan a que no solamente se vuelva a poner esta medida sino que se implemente una verdadera política de apoyo. Finalmente, ha recordado que España ocupa el puesto 25 de los 27 países de la UE respecto a ayudas en general y eliminando esta medida ocupará el último lugar.
Por el contrario, las asociaciones de Mujeres han aplaudido la desaparición del Cheque-Bebé de 2.500 euros a partir del próximo 1 de enero por considerarlo una medida "natalista" e "inadecuado".
MEDIDA "NATALISTA"
Concretamente, la presidenta de la Asociación de Mujeres Separadas y Divorciadas, Ana María Pérez, ha señalado, en declaraciones a Europa Press, que era una iniciativa fundamentalmente "natalista" y, en ese sentido, le parece bien que la quiten. Además, considera que, en cualquier caso, "tener hijos no es ninguna obligación".
Igualmente, ha subrayado que debería haberse destinado únicamente a aquellas personas "más necesitadas". Sin embargo, ha destacado que "sí pondría el acento en otros recursos sociales como las pensiones alimenticias de los hijos ya nacidos, las pensiones de las viudas, que están desapareciendo, y sobre todo especial interés en el fenómeno más grave que es el de la atención a las afectadas por la violencia de género".
Mientras, la presidenta de Mujeres Juristas THEMIS, Ángela Cerrillos, ha indicado que "cuando se aprobó esa prestación le pareció absolutamente inadecuada". A su juicio, las aportaciones sociales deben estar relacionadas con "la necesidad y el nivel de renta de la persona que las recibe". Por ello, ha manifestado que "no le parecía equilibrado que con independencia del nivel de renta todas las mujeres recibieran la misma prestación".
Finalmente, ha concluido que "no le parece mal que se haya quitado la prestación para las rentas más altas y más cuando con la situación del país era muy difícil de mantener". No obstante, reconoce que "lo ideal sería que se mantuviese para las mujeres con renta más baja".
