Almería.- El Ayuntamiento culpa del colapso del tráfico por la protesta de COAG "a las autoridades del PSOE"

Actualizado: miércoles, 23 mayo 2007 17:36

ALMERÍA, 23 May. (EUROPA PRESS) -

El Ayuntamiento de Almería achacó hoy "a las autoridades socialistas" y "a la falta capacidad negociadora de la Junta de Andalucía" la responsabilidad de los problemas de tráfico en el centro de la ciudad ocasionados por una caravana de camiones de tara inferior a 3.500 kilos para protestar por la supresión de la tarjeta de transporte de frutas y hortalizas para este tipo de vehículos.

El concejal de Alcaldía, Francisco Amizián, salió así, en un comunicado de prensa, al paso de las críticas ciudadanas "que contra el consistorio" pudiese generar la manifestación para desviarlas hacia administración autonómica y Subdelegación del Gobierno central, culpables "de la escasa fluidez del tráfico que ha afectado a miles de almerienses a lo largo de la mañana.

Amizián criticó en esta línea lo que, a su juicio, ha sido "falta de colaboración" y afirmó que resulta "escasamente entendible que no se haya avisado o publicado un aviso de los problemas que podrían producirse, para que los ciudadanos hubieran podido saber lo que se avecinaba"

El edil de Alcaldía, quien insinuó que detrás de la actitud de la Subdelegación del Gobierno central podría haber "un deseo explícito" de que los ciudadanos responsabilizaran directamente al Ayuntamiento de la capital, felicitó la "magnífica actuación" de la Policía Local en la gestión del tráfico y tildó de "legítima" la protesta de los agricultores.

Unos 1.200 camiones acudieron hoy desde La Mojonera (Almería) y el Levante provincial a la convocatoria de la organización agraria COAG para exigir la homologación de los vehículos de menos de 3.500 kilos de tara para el transporte de mercancías tras la aprobación de una disposición especial para Almería que lo permite si pasan la ITV y realiza la citada homologación un concesionario.

La protesta contra esta medida gubernamental, que según COAG deja en "un limbo legal" a cerca de 5.000 camiones ya que beneficia sólo a un cinco por ciento de la flota total, provocó retenciones de hasta tres kilómetros en la Autovía del Mediterráneo y un importante colapso de tráfico en las principales avenidas de la capital.