Mesa del Agua de Almería critica "pasos cortos y muy lentos" para reactivar desaladora del Almanzora tras ocho años

Planta desaladora de Villaricos, inutilizada desde 2012
Planta desaladora de Villaricos, inutilizada desde 2012 - MESA DEL AGUA - Archivo
Publicado: lunes, 28 septiembre 2020 15:13

ALMERÍA, 28 Sep. (EUROPA PRESS) -

La Mesa del Agua ha lamentado los pasos "cortos y muy lentos" en la puesta en marcha de la desaladora del Bajo Almanzora a la que las riadas de 2012 dejaron fuera de funcionamiento, y ha criticado los plazos que se han dado que apuntan a mediados de 2022 como fecha para la primera de las tres fases de prueba.

"No nos podemos imaginar, de ahí el desánimo que hemos mostrado en múltiples ocasiones, para cuando podrán terminar las obras y poner en marcha la desaladora", han trasladado los regantes.

En un comunicado, el presidente, José Antonio Fernández, ha recordado que fue en agosto cuando el Gobierno de España anunció que se licitarían las obras para proteger la planta frente a posibles futuras avenidas de agua y que se destinaría 8,8 millones de euros para esa actuación con 18 meses de ejecución.

"Es decir, que si se licitaran a finales de este año se concluirían como pronto en el verano del año 2022 cuando, además, el secretario de Estado de Medio Ambiente, Hugo Morán, afirmó que las obras para su puesta en marcha se realizarían en tres fases", ha asegurado.

Fernández ha indicado que los regantes "no perciben" los "pasos" que dice estar dando Acuamed y que eso "provoca desanimo".

"Hace ocho años, la riada que se vivió con especial virulencia en esta zona de nuestra provincia arrasó e inutilizó la desaladora que debería estar aportando 20 hectómetros cúbicos anuales en una zona de regadío especialmente seca", ha remarcado para reprochar que las administraciones "hayan echado balones fuera hasta hacer que esté sin entrar en funcionamiento"

Los regantes han reclamado "avances significativos y que sean factibles" al tiempo que han subrayado que el suministro eléctrico corre a cargo de ellos mismos "para adelantar los plazos ya que no se proyectó por el Gobierno ni se llevo a cabo".

"Tendremos que adelantar esa obra porque la administración va a tardar mucho en hacerlo y queremos que, cuando esté reparada la planta desaladora el sistema eléctrico ya esté listo", ha dicho Fernández, quien ha abogado por trabajar para implantar el uso de energías renovables para la desalación.

En esta línea, ha señalado que el abaratamiento del precio del agua desalada puede obtenerse directamente mediante la disminución de los costes energéticos del proceso de desalación, que actualmente representan el 59 por ciento del precio final del agua desalada por ósmosis inversa.

"Esta disminución de costes sería posible mediante la implantación de las energías renovables para generar el suministro eléctrico necesario para la desalación", ha concluido.