ALMERÍA, 12 Dic. (EUROPA PRESS) -
La Audiencia de Almería ha confirmado la pena de seis meses de prisión para un hombre que durante tres años falsificó sellos de curso legal, a los que, con un boligráfo, alteraba el valor en 80 céntimos y con los que remitió al menos 55 cartas por las que deberá indemnizar al Servicio de Correos y Telegráfos con 44 euros.
La sentencia, recogida por Europa Press, desestima el recurso de apelación interpuesto por la defensa del acusado, quien alegó frente al fallo del Juzgado de lo Penal número 2 que el engaño, realizado "con un rotulador", era "tosco" y carecía, por tanto, de "aptitud necesaria para engañar a los funcionarios al ser fácilmente detectable".
Considera, sin embargo, la Audiencia Provincial que, según el testimonio prestado en sala por un trabajador del Correos en calidad de testigo, el darse cuenta de la falsedad requería una revisión individualizada del timbre que, "por la veloz dinámica de trabajo, casi nunca se producía" pese a que éste reconoció ante la sala que se trataba de un "burda" alteración.
Sostiene, en esta línea, que su manipulación solo sería apreciable "si no se topa con el matasellos" que --ahonda-- "enmarcara la alteración", por lo que ratifica la pena de seis meses de prisión impuesta al hombre como autor de un delito de falsificación de objetos timbrados.
El acusado, entre finales de 2004 y mayo de 2007, se dedicó a la compra de sellos de curso legal por valor de 0,02 euros y destinados a la remisión de correo postal. Siempre del mismo modo, modificaba después el importe con un bolígrafo con el que simulaba que el segundo cero era un ocho. En juicio se logró acreditar que envió al menos 55 cartas con este método, por el que causó un perjuicio económico al servicio de 44 euros.
