Publicado 23/07/2022 16:11

Más de 21.700 toneladas de aceite industrial usado recogidas en Andalucía fueron recicladas en 2021

Mapa de la recogida de aceites usados en zonas rurales en el entorno de recursos hídricos.
Mapa de la recogida de aceites usados en zonas rurales en el entorno de recursos hídricos. - SIGAUS

El pasado año se recogió el 100% de este residuo peligroso en la comunidad

SEVILLA, 23 Jul. (EUROPA PRESS) -

Durante 2021, a través de la red de gestores que trabajan en el marco del Sistema Integrado de Gestión de Aceites Usados (Sigaus), una iniciativa creada por la asociación de las principales empresas fabricantes de aceites industriales --productos destinados a lubricar la maquinaria industrial--, se recogieron el pasado año en Andalucía un total de 21.772 toneladas brutas de estos aceites, con el objetivo de devolverlos al mercado como nuevos lubricantes o combustibles.

Así lo ha indicado Sigaus en un comunicado, en el que ha explicado que el año pasado estas toneladas brutas de aceites usados --denominadas así porque incluyen elementos añadidos como agua y otros sedimentos-- estuvieron repartidas entre 12.888 establecimientos --siendo el 57% talleres mecánicos-- de sectores como la automoción, la industria, el transporte, el comercio o la construcción.

De esta forma, ha señalado que la generación de estos aceites "fue extremadamente dispersa" en el territorio, ya que más de la mitad de estos puntos productores de aceite usado --un 62%-- generaron menos de una tonelada de residuo, acumulando entre ellos apenas un 16% del total del aceite usado generado.

Asimismo, ha añadido que, en total, para recoger todo el aceite usado fue necesario efectuar 36.741 operaciones de recogida entre 630 municipios andaluces.

"UN RESIDUO MUY CONTAMINANTE"

Por otro lado, señala, "una vez terminada su vida útil", el aceite industrial se convierte en "un residuo muy contaminante" debido a la presencia de metales pesados y otras sustancias tóxicas, que puede "afectar negativamente a nuestro entorno y a la salud de las personas si no se trata adecuadamente".

Por ello, "es fundamental" contar con un sistema logístico y financiero que permita recoger este residuo allí donde se produce, "aunque sea en zonas alejadas o de difícil acceso", ha apuntado.

Así, debido al sistema logístico puesto en marcha por Sigaus, se recuperaron el pasado año 6.260 toneladas de aceite usado en 440 municipios rurales andaluces, otras 6.155 en municipios de montaña y 135 en municipios de menos de 1.000 habitantes.

"El coste logístico de recuperar el residuo en este tipo de zonas es muy elevado, ya que implica largos desplazamientos poco rentables, más aún en estos momentos en el que la crisis energética ha elevado tanto el precio de los combustibles", ha subrayado el comunicado.

Por este motivo, considera, la financiación de la recogida del residuo "resulta fundamental" como servicio ambiental, pero también "económico y social" en estas zonas poco pobladas y alejadas de los grandes núcleos urbanos que, sin embargo, "suelen contar con grandes valores naturales".

En relación al tema, el director general de Sigaus ha destacado que en 2021 han sido testigos "del aumento de los precios de la energía y de los combustibles, un incremento que en los últimos meses ha superado el 60%".

"Dado que cada año es necesario recorrer miles de kilómetros para recuperar el aceite usado que se genera en Andalucía, resulta evidente cómo la crisis en los precios de la energía tiene un fuerte impacto en los costes de gestión del residuo del aceite industrial", ha agregado.

El director ha concluido que "para que estos vaivenes del mercado no impidan que la gestión del aceite usado se lleve a cabo, la financiación que aportamos para cubrir el déficit de estas actividades resulta fundamental, para que ésta sea viable ambiental y económicamente."

Por otro lado, Sigaus ha señalado la "gran importancia" que tuvo la recogida del residuo junto a espacios protegidos, donde evitar la contaminación del aceite usado "resulta imprescindible para evitar un importante impacto ambiental".

Asimismo, en 2021 se atendieron 650 establecimientos generadores de este residuo situados en el entorno de 49 espacios protegidos andaluces, entre los que se encuentran parques nacionales, parques naturales, reservas de la biosfera o reservas naturales.

En estos enclaves, apunta, se recogieron en total 730 toneladas de aceite usado. Como ejemplo, en el Parque Natural de la Sierra de Grazalema se recogieron 13 toneladas, y 32 toneladas en la Reserva de la Biosfera de Sierra Nevada.

En este sentido, también ha destacado la recogida del aceite usado en el entorno de recursos hídricos, como ríos, embalses o lagos. Hay que tener en cuenta, resaltan, que se trata de "un residuo especialmente dañino" para los medios acuáticos ya que, si se vierte en el agua, crea una capa que impide el traspaso de oxígeno, "imposibilitando la vida para la fauna y flora".

En estos entornos se recogieron 232 toneladas de residuo en 193 puntos productores, recuperándose 4.408 kilos en instalaciones a menos de 250 metros de zonas sensibles a la contaminación de las aguas, como la Bahía de Cádiz, Doñana, o las Marismas del Odiel.

TRATAMIENTOS CON BENEFICIOS AMBIENTALES Y ECONÓMICOS

El Sistema ha expuesto que, una vez recogido, el aceite usado fue trasladado a centros de transferencia "para su análisis y eliminación de posibles impropios", proceso que una vez completado resultó en una cantidad neta de aceites usados de 21.726 toneladas, volumen "finalmente tratado para obtener nuevos productos, siguiendo los principios de la economía circular".

De esta cantidad, "la práctica totalidad del residuo", 20.745 toneladas, fueron destinadas a regeneración. "Se trata de un tratamiento que permite obtener nuevas bases lubricantes del aceite usado y que es el que prioriza la actual normativa", ha remarcado.

Debido al residuo regenerado en Andalucía durante el pasado año fue posible producir cerca de 13.000 toneladas de nuevos lubricantes y ahorrar más de seis millones de barriles de petróleo, en comparación a si esos lubricantes se hubiesen producido a partir del refino del crudo.

Además, explica, el aceite usado regenerado también permitió evitar la emisión de cerca de 14.000 toneladas de CO2 a la atmósfera, y el gasto de 264 gigavatios hora (GWh) lo que supuso "otro claro beneficio" para el entorno.

El resto del aceite usado no regenerado fue "valorizado energéticamente" mediante otro tratamiento que permite transformar el residuo en un combustible de uso industrial que suele usarse en hornos de cementeras, papeleras o en centrales térmicas de generación eléctrica, minimizando así el uso del fuel óleo o de otros combustibles provenientes del petróleo.

Este tratamiento también reportó "diversos beneficios" al entorno, ya que gracias al aceite usado valorizado energéticamente en Andalucía --981 toneladas-- fue posible evitar la emisión de 537 toneladas de CO2 a la atmósfera y ahorrar un GWh de energía.

Por último, el director general de Sigaus ha declarado que "la Economía Circular del aceite usado es una realidad posible gracias a la colaboración conjunta de empresas adheridas, gestores del residuo, administraciones públicas y ciudadanía. Llevamos 15 años asegurando la gestión de este residuo, afrontando para ello diferentes crisis --de oferta, de demanda, el coronavirus y ahora los precios energéticos--, y seguiremos trabajando en esta línea para que ni una sola gota de este residuo contamine nuestros paisajes",