El Ayuntamiento devuelve a la Plaza de las Velas la estatua de 'La Caridad' tras su restauración

ALMERÍA 31 Ago. (EUROPA PRESS) -

El Ayuntamiento de Almería (PP) ha anunciado que el próximo 12 de septiembre devolverá a la Plaza de las Velas, situada en la Rambla Federico García Lorca, la estatua de 'La Caridad', que fue retirada a finales del pasado año para ser restaurada debido al mal estado de conservación que mostraba, especialmente en el rostro de la figura principal.

Según informa el Consistorio en una nota, las labores de restauración, que han sido financiadas por el Área de Cultura, se iniciaron en marzo a cargo de la empresa Domos, que también ha trabajado en la reparación de las figuras de hierro fundido y en los sillares, así como en la escritura conmemorativa que inspiró la imagen.

Este monumento fue construido en homenaje a las víctimas de la inundación que sufrió Almería en el año 1891, y que es símbolo de la humanidad que la Reina Regente María Cristina tuvo con la ciudad tras esta catástrofe natural. "Desde el Área de Cultura estamos especialmente contentos de poder devolver a su lugar una talla que cuenta con tanto significado histórico para la capital, y más teniendo en cuenta que pone en valor las labores y raíces de nuestros antepasados, como un símbolo de superación", ha destacado el edil de Cultura, Ramón Fernández-Pacheco.

La imagen fue inaugurada en 1894 tras las inundaciones de tres años atrás en las que perdieron la vida una veintena de personas, entre ellas cuatro niños. El coste de la estatua, sufragado por la Reina María Cristina, fue de 5.235 pesetas. Además, se trata de la primera estatua erigida en la ciudad.

La mandataria también encauzó la actual Rambla Federico García Lorca, construyó viviendas para los damnificados y el barrio o Paseo de la Caridad. La obra fue elaborada por el escultor almeriense Luis Fernández Cortés, sobre un dibujo de Carlos López Redondo, y fue fundida por los Talleres Francisco Oliveros y Compañía. El monolito representa una madre que sostiene a un niño en brazos y otro que aparece agarrado a su falda, junto a un pergamino con un texto que evoca las ayudas y reparaciones realizadas por la Casa Real a finales del siglo XIX.