Experto alerta sobre el uso perverso de la ayuda humanitaria como "propaganda de guerra"

Manuel Díaz Olalla en los cursos de verano de la UNIA
UNIA
Publicado: martes, 24 julio 2018 15:50

LA RÁBIDA (HUELVA), 24 Jul. (EUROPA PRESS) -

El vicepresidente de la Sociedad Española de Medicina Humanitaria (SEMHU) y asesor del Instituto de Salud Pública del Ayuntamiento de Madrid, Manuel Díaz Olalla, ha alertado este martes en los cursos de verano de la Universidad Internacional de Andalucía (UNIA) en su sede de La Rábida (Huelva) sobre el uso perverso de la ayuda humanitaria como "propaganda de guerra".

Díaz Olalla ha participado en el seminario sobre 'La asistencia sanitaria a la infancia en las crisis humanitarias', donde ha lamentado que se viene produciendo una perversión del concepto de asistencia humanitaria porque "son términos que venden bien, agradan y son positivos" pero también "sirven como justificación para guerras y agresiones", lo que, a su juicio, supone "un abuso y una manipulación".

En su opinión, la ayuda humanitaria debe estar ajustada a las necesidades de la población en situaciones límites y realizarse "sin devolución ni contrapartida", ya que responde a un principio de universalidad que "es la conjunción de un derecho que tiene la humanidad a ser atendida y el deber de los demás a ayudar".

Díaz Olalla ha señalado que, en situaciones de crisis donde los recursos y los servicios se ven sobrepasados por exceso de demanda, se deben priorizar aspectos como "reducir la mortalidad y la morbilidad; salvar vidas; curar las enfermedades que se ocasionen; aliviar el dolor y salvar las injusticias".

En este sentido, ha incidido en que casi todas las víctimas de los conflictos registrados en los últimos decenios en África son el resultado inmediato del desplazamiento masivo de la población y la hambruna, ya que la mayoría de ellos fallecieron, además de por desnutrición, por diarreas, infecciones respiratorias o enfermedades como sarampión y paludismo.

Sin embargo, el ponente ha destacado que esta situación de vulnerabilidad no se limita a las personas desplazadas o en tránsito, sino que afecta de forma mucho más general porque "la mitad de la población en los países en desarrollo vive en condiciones de inseguridad residencial".

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