Durante el 2010 se produjeron casi 200 agresiones a sanitarios del sistema público andaluz
MÁLAGA/SEVILLA, 21 Ene. (EUROPA PRESS) -
Un usuario que requirió de la asistencia del servicio de emergencias sanitarias 061 ha sido condenado a un año de prisión por un delito de atentado contra un profesional de este servicio, según ha informado este viernes en un comunicado el propio 061.
En concreto, la sentencia notificada corresponde a la agresión sufrida por un técnico de emergencias sanitarias en la provincia de Málaga en 2008 durante el desempeño de su labor. La sentencia dictada tipifica el hecho como delito de atentado contra un funcionario público y condena al responsable a una pena de un año de prisión, más nueve meses por un delito de lesiones y a una multa económica por falta contra el orden público.
En este caso, el juzgado de lo penal número 10 de Málaga considera adecuado imponer estas sanciones al acusado dada la gravedad de los hechos y por considerar la agresión a un funcionario público de gran violencia. Las lesiones causadas incapacitaron al profesional del 061 durante varios días para el ejercicio de su actividad.
En 2010, se registraron en Andalucía 15 situaciones de agresiones a profesionales de la Empresa Pública de Emergencias Sanitarias (EPES 061), que afectaron a un total de 31 profesionales, de los cuales 14 sufrieron agresiones físicas y 17 verbales.
El sistema sanitario público andaluz fue pionero en diseñar y aprobar un plan de prevención y actuación contra las agresiones a profesionales sanitarios, puesto en marcha por la Consejería de Salud en 2005.
Precisamente este pasado miércoles en Sevilla, la consejera de Salud, María Jesús Montero, ha detallado que el plan andaluz de prevención contra las agresiones a los sanitarios ha registrado en 2010 un total de 943 actos violentos, de las que 736 eran de tipo verbal y 207 de tipo físico.
Estas 943 agresiones, suponen 193 más que las registradas en 2009, siendo también las agresiones verbales las que más se han incrementado (en 181) por sólo 12 más las físicas.
Montero también ha recordado que su Consejería ha invertido en estos años más de 114 millones de euros en prevención, con cursos de formación, timbres antipánico, más de 1.200 videocámaras y más de 400 vigilantes de seguridad, entre otros elementos.
