La Junta y la CEA ven necesaria la colaboración público-privada para la recuperación económica en la crisis del COVID-19

Un grupo de personas pasean por el paseo marítimo de Pedregalejo  durante la Fase 1 en Málaga a 20 de mayo del 2020
Un grupo de personas pasean por el paseo marítimo de Pedregalejo durante la Fase 1 en Málaga a 20 de mayo del 2020 - Álex Zea - Europa Press
Publicado: jueves, 28 mayo 2020 13:22

Piden al Gobierno estabilidad en la toma de decisiones y trato igualitario para Andalucía en la desescalada

MÁLAGA, 28 May. (EUROPA PRESS) -

El consejero de Hacienda, Industria y Energía de la Junta de Andalucía, Juan Bravo, y el presidente de la Confederación de Empresarios de Andalucía (CEA), Javier González de Lara, han coincidido en la necesidad de la colaboración público-privada, el diálogo social y la mejora del modelo productivo para activar la recuperación económica en la crisis provocada por la pandemia del coronavirus.

Ambos han participado en un debate digital organizado por el diario La Opinión de Málaga en el que han analizado la realidad económica que ha dejado la pandemia en Andalucía y las medidas que creen necesarias para superar sus efectos.

Ambos han resaltado que esta crisis es coyuntural en lugar de estructural, por lo que prefieren mejorar el modelo productivo con medidas como la digitalización, y han optado por defender el turismo, que han recordado ha sido el sector más afectado, pero también el que permitió a Andalucía recuperarse en la anterior recesión, por lo que apuestan por su mejora, ya que han notado una mejora en las reservas para los meses de julio y agosto.

"Intentamos activar varias vías intentando copiar un poco lo que la crisis de 2007-2008 nos llevó a analizar", ha indicado Bravo, que ha precisado que entonces hubo "dos grandes elementos" que para el fueron determinantes para que España comenzase a crecer en 2012.

En primer lugar, ha resaltado las reformas que impulsó el Gobierno, como la reforma laboral o la simplificación administrativa, y por otro lado, la inyección económica, que se hizo para el pago a proveedores, "la ayuda para los empresarios más importante que se haya podido adoptar posiblemente en la época de la democracia", ha resaltado.

En esta misma línea, junto a los empresarios y los sindicatos, la Junta ha optado, en primer lugar, por la "agilización, la simplificación, menos trabas para hacer más fácil montar un negocio", ha indicado el consejero.

"En ese sentido hablamos de agilizar el medio ambiente, como ya la consejera ha hecho y les puedo asegurar que va a hacer un mayor esfuerzo si cabe con los expedientes de medio ambiente: de los 4.500 que se encontró ha reducido el 50 por ciento, pero tenemos margen todavía de mejora, en fomento, industria, suelo industrial, etcétera", ha precisado.

Otra línea que se ha tomado es la de la liquidez con Garántia, participada por la Junta, "un ejemplo claro de esa colaboración público-privada", ha remarcado.

Esto ha permitido "no solo haber puesto a disposición de los ciudadanos 700 millones de euros, sino haberlo hecho de manera rápida". "En una semana prácticamente un ciudadano desde que va al banco, hasta que tiene el dinero depositado en su cuenta encuentra respuesta de cuales son sus posibilidades", ha subrayado.

También han pospuesto "toda la presentación de los impuestos más allá de tres meses para que los empresarios no se preocupen ahora mismo de pagar los impuestos autonómicos, sino en todo caso de pensar en cómo reactivar la economía y cómo ser más eficientes".

"Ahí entendíamos nuestra vía de la liquidez, del apoyo financiero a las empresa, también reduciendo el periodo medio de pago, que se ha reducido a 16 días", ha añadido.

Bravo ha señalado que "esto tiene que ir acompañado de oportunidades a aquellos sectores que se nos van a quedar más vulnerables", por lo que han impulsado la ayuda a los autónomos, de 300 euros, y se ha anunciado la ayuda para alquileres.

Asimismo, ha considerado que la renta mínima que propone el Gobierno "es una buena medida", pero prefiere vincularla con "un empleo, una cotización a la seguridad social, una cotización para su utilización en el día de mañana, una formación, un currículum, experiencia, y una posibilidad mayor de trabajo", como se hace en otros países.

"Esto nos tiene que llevar hacia ese cambio de establecer incluso las ayudas desde la Junta para intentar vincularlas directamente al empleo, trabajar con esas personas vulnerables y también lógicamente con los empresarios, que son los que en este caso nos tienen que ayudar", ha apuntado.

Asimismo, se ha creado un fondo para dotar a las universidades de 125 millones de financiación para que puedan ser un elemento de actividad económica, transferencia del conocimiento y capacidad de inversión, ha detallado Bravo, que ha puesto como ejemplo también que "en la Alhambra, con su remanente de tesorería se ha hecho un enorme esfuerzo para acometer mejoras en la misma y que sea un elemento instructor de la actividad económica".

Por su parte, González de Lara ha recordado que el 70 por ciento de la actividad económica de Andalucía quedó paralizada el 14 de marzo y que los empresarios han tenido que adaptarse a esta situación y aplicar medidas sanitarias sin medios técnicos. Así, ha indicado que las previsiones son "nada halagüeñas", con una caída en torno al 15-20 por ciento del PIB en Andalucía, que alcanzaría un 25-30 por ciento de paro.

Sin embargo, ha afirmado que "no podemos estar en el desánimo" y ha abogado por "ponerse el traje de faena", por lo que ha pedido agilidad de la respuesta en la toma de decisiones, "sobre todo las administraciones públicas con los agentes económico-sociales".

"En segundo lugar, hay que dar tiempo para recuperarse", ha indicado, ya que las empresas "necesitan capacidad, respiradores financieros, económicos, fiscales, para poder salir adelante". A esto acompaña la liquidez financiera, como las puestas en marcha por la Consejería de Hacienda y compañías importantes de Andalucía para dotar de liquidez a pymes y autónomos.

También ha pedido flexibilidad en la aplicación de las medidas laborales, ampliar los plazos de los ERTE más allá del 30 de junio y, en último lugar, el impulso público necesario para poner en marcha iniciativas público-privadas e inversión para activar el consumo.

Todo esto permitirá, ha dicho, que los trabajadores vuelvan a sus puestos y a las familias "recuperar su normalidad de antes, no esa nueva normalidad de siempre".

CRÍTICAS AL GOBIERNO

Tanto Bravo como González de Lara han criticado los criterios del Gobierno para que Málaga y Granada permanezcan en fase 1 del plan de desescalada, mientras otras provincias con datos similares ya han pasado a la fase 2.

"No pido un trato especial para Andalucía, pido el mismo trato", ha señalado Bravo, que ha asegurado que los datos de esta región son "un pelín peores que Portugal, donde sin embargo la desescalada está siendo mucho más rápida".

El presidente de los empresarios andaluces ha advertido que "Andalucía puede quedarse atrás", ya que si no hay movilidad entre provincias "el sector turístico va a tardar más en arrancar".

Igualmente, han lamentado que se ha tardado en decidir sobre el uso de las mascarillas, algo que Bravo considera "fundamental", a la vez que "nos falta conciencia" sobre su utilización, ya que "ese respeto por las medidas nos va a permitir recuperar la movilidad", mientras que González de Lara ha pedido más estabilidad en la toma de decisiones.

En este sentido, el empresario ha valorado que la ministra de Economía, Nadia Calviño, "está haciendo una magnífica labor", aunque no coincide con el vicepresidente segundo, Pablo Iglesias, en cuanto a la derogación de la reforma laboral, que rechaza González de Lara, al igual que Bravo.

El presidente de la CEA ha considerado que "una crisis no puede ser pretexto para cambiar marco jurídico" y ha advertido de que "como hagamos un mando único económico estamos perdidos", ya que "nos da igual el color político, queremos que se acierte, que las cosas se hagan bien".

Al respecto, Bravo ha añadido que "al ciudadano le da igual el color político" y ha pedido diálogo social, ya que sindicatos, empresarios y administraciones están de acuerdo en la búsqueda de un empleo de calidad.

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