MALAGA, 24 Mar. (EUROPA PRESS) -
El joven Adrián C.L., de 22 años, que se atrincheró esta mañana en su vivienda de la calle Antonio María Isola de La Palmilla, donde amenazó con matar a su hija de dos años, tiene en vigor una orden de alejamiento dictada por el Juzgado de Violencia número 1 de Málaga y, además, le constan tres detenciones anteriores, dos por malos tratos en el ámbito familiar y otra por robo con violencia o intimidación.
Los hechos comenzaron, según los vecinos, sobre las 06.30 horas, cuando la joven fue a denunciar a su pareja a la Policía por malos tratos; y terminaron seis horas después. Desde la Comisaría, precisaron que sobre esa hora se recibió una llamada en la Sala del 091 procedente de la Comisaría del Distrito Norte, donde se había presentado una mujer joven manifestando que su pareja se había encerrado en el domicilio y amenazaba con matar a su hija Lucía, de dos años.
Además, confirmaron en un comunicado, que la mujer, María de los Angeles R.L., de 22 años, se había escapado tras dos días retenida en un cuarto del domicilio familiar de la barriada de La Palmilla, en Málaga, y la que, al parecer, también había estado sometida a malos tratos, golpeada permanentemente con una correa. Este extremo fue relatado también por la vecina que acogió a la mujer durante los hechos en su casa del tercer piso, Samara, quien dijo que "llevaba dos días pegándola".
"EL PEOR DIA DE TU VIDA"
"Y ayer le dijo que hoy iba a ser el peor día de su vida, por eso se escapó esta mañana para denunciarlo", apuntó la joven, quien explicó que no se pudo llevar a la pequeña porque "estaba abrazada al padre y no quería despertarlo". La pareja llevaba junta entre tres y cuatro años y estaba residiendo en esa casa desde hacía casi seis meses, a través de la mediación de Cáritas, según indicaron a Europa Press los propietarios de la vivienda situada en la cuarta planta.
Los vecinos indicaron que el joven "lo que quería era que la Policía se fuera y que entrara ella sola". Mientras que algunos aseguraron que el hombre amenazó con matarse él y a la niña con un cuchillo, extremo también confirmado por la Comisaría, otros vecinos insistieron en que Adrián C. "nunca" haría nada contra su hija porque "siempre estaba muy pendiente de ella".
Los vecinos relataron que María de los Angeles era víctima de malos tratos y que en alguna ocasión la había visto con la cara amoratada. Además, aseguraron que a veces la dejaba encerrada en la casa, pero que seguía con él porque "estaba sola" y él decía que la quería, por eso "lo perdonaba".
DISPOSITIVO
Desde la Comisaría precisaron que una vez se comprobó que efectivamente el hombre se encontraba atrincherado en la vivienda con la pequeña, se organizó el dispositivo necesario para solucionar la situación y se constituyó el correspondiente servicio policial para evitar un mal mayor, requiriéndose la presencia del Grupo Operativo Especial de Seguridad (GOES), ambulancia y bomberos.
A través de una ventana se inició un diálogo con el individuo que "se muestra en todo momento muy agresivo", según informaron fuentes policiales, quienes apuntaron que mientras que se hablaba con él, se consolidó el cordón protector de la zona y la Unidad de Operaciones Especiales estudió las posibilidades de asalto y los riesgos inherentes.
La conclusión fue que el asalto sólo podría efectuarse desde el exterior por las ventanas, aunque se continuó el diálogo, para lo que se contó con personas cercanas al individuo. A lo largo de la mañana, amenazó en numerosas ocasiones con matar a su hija, suicidarse, quemar la casa con todos dentro, tirar a la niña por la ventana, evidenciando un comportamiento muy agresivo, según la Policía.
"En un momento, él la llamó y le preguntó que si lo quería y ella le dijo que sí, para que no le hiciera nada a la pequeña", afirmó la vecina que reside puerta con puerta, quien precisó que llegó un momento en el que "parece ser que se quedó dormido porque ya no podían hablar con él" y quien explicó que la puerta estaba bloqueada por muebles.
En este sentido, la Policía indicó que al perderse el contacto, se decidió entrar cuanto antes y se efectuó el asalto a través de las ventanas de la vivienda, con la colaboración de los Bomberos. Esta intervención se saldó "con éxito absoluto", consiguiéndose liberar a la niña de dos años "sin daño físico alguno", según indicaron.
La mujer presentaba lesiones aparentes producto de los malos tratos continuados de los que ha sido objeto y se ha puesto en manos del Servicio de Atención a la Familia, al igual que su hija Lucia. Igualmente, el detenido, una vez asistido médicamente, quedó a cargo de la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta de la Comisaría Provincial.
Numerosos vecinos de la calle y prácticamente de toda la barriada de La Palmilla se congregaron en las inmediaciones de la vivienda, a pesar del cordón policial colocado. Si mientras el detenido era conducido por las escaleras hacia el coche policial, los vecinos gritaron todo tipo de insultos contra él, la salida de los efectivos de lo GOES fue muy diferente, ya que fueron recibidos con aplausos y gritos de apoyo.