Málaga.- El imán de Fuengirola acaba el curso impuesto por el juez, cuyo balance es "positivo", según su profesor

Actualizado: domingo, 25 junio 2006 13:46

Mohamed Kamal Mostaphale se muestra "muy satisfecho", ya que "todo lo que implique saber cosas nuevas, siempre es muy positivo"

MALAGA, 25 Jun. (EUROPA PRESS) -

El imán de la localidad malagueña de Fuengirola, Mohamed Kamal Mostaphale, ha terminado ya el curso que la Audiencia de Barcelona le impuso como medida sustitutiva de la condena de un año y tres meses de cárcel por un delito de provocación a la violencia por razón de sexo en su libro 'La mujer en el Islam'. El profesor de Derecho Constitucional de la Universidad de Málaga (UMA) Angel Rodríguez, encargado de impartir estas clases, indicó que el balance es "positivo", ya que "ha sido una experiencia muy formativa para él y muy interesante para mí".

De hecho, Rodríguez apuntó que si hubiera habido un examen tipo, "sin duda, lo habría superado", añadiendo que las clases han sido "muy interactivas". El curso, que comenzó el pasado mes de noviembre y terminó a finales de mayo, era de 48 horas lectivas, que se distribuían en dos semanales; además, seis de ellas se dedicaron a la realización de trabajos con temáticas como la situación de la mujer en el Derecho español y en el musulmán.

En cuanto a los contenidos, fueron fijados por el propio auto judicial y estaban relacionados con el principio de dignidad de la persona en la Constitución, la Declaración Universal de Derechos Humanos y el derecho a la igualdad, con especial incidencia en la igualdad de género. Según Rodríguez, el imán "seguía las explicaciones con atención y leía los textos que le recomendaba".

En su opinión, "el programa se ha cumplido y se ha hecho bien", enviando al juez un informe cada dos meses; otra cuestión diferente, tal y como advirtió, será determinar ahora "la idoneidad o no de este tipo de prácticas académicas como una pena sustitutoria de una privación de libertad". Al respecto, dijo a Europa Press que no tiene aún un criterio formado, ya que, "como en todo, hay aspectos positivos y otros que quizá no lo sean tanto".

De cualquier forma, el profesor destacó que "todo lo que sean penas alternativas a la privación de libertad, que no es una buena medida, siempre es positivo", agregando que, a la hora de establecer un delito de opinión, que "siempre es controvertido, hay que pensarlo mucho antes de condenar o prohibir un libro o sobre todo si supone enviar a alguien a la cárcel".

De todos modos, manifestó que como experiencia personal ha sido "muy interesante", en tanto que no sólo ha supuesto el conocimiento por parte del imán de los pilares básicos de la Constitución, sino también "el modo como la ven españoles que, por su religión y su cultura, no tienen la aproximación mayoritaria de la sociedad española, y que ya hay que tener en cuenta porque cada vez esas personas tienen más presencia e importancia".

IMAN

Por su parte, el imán de Fuengirola se mostró "muy satisfecho" con el desarrollo de este curso, puesto que, como resaltó, "cualquier persona, de cualquier edad, necesita siempre saber más y, para mí, ha sido una prueba muy interesante y positiva tener estos nuevos conocimientos". A su juicio, "todo lo que implique saber cosas nuevas, siempre es muy positivo".

Mohamed Kamal Mostaphale, quien se refirió a su profesor diciendo que es "una persona estupenda y muy profesional", hizo hincapié no sólo en haber aprendido una materia, sino también en "haber adquirido unos conocimientos que han enriquecido mi vida, al haber tenido contacto con otros profesores y con alumnos de la Facultad de Derecho". "He tenido la oportunidad de conocer un mundo diferente, ya que mis estudios estaban basados en el enfoque de los países árabes", declaró.

En diciembre de 2004 la Audiencia de Barcelona, 22 días después de que el imán ingresara en prisión por un delito de provocación a la violencia por razón de sexo bajo la acusación de incitar a pegar a las mujeres, dictó una resolución en la que acordaba su puesta en libertad y le imponía un curso de seis meses en cuyo contenido destacasen los artículos 10, 14 y 15 de la Constitución española y la Declaración Universal de los Derechos Humanos.